Es ahí donde el ambiente del pabellón capitalino, que debe lucir el aspecto de las grandes citas históricas jugará un papel determinante y por ello el club ademarista quiere hacer todo lo posible para llenar el Palacio.
A partir de esa intención la directiva ha decidido no solo no encarecer los precios para el que está llamado a ser uno de los partidos del año, sino que los ha abaratado y promoverá también la asistencia de los más jóvenes para rejuvenecer su masa social de cara al futuro y engancharles al balonmano.
De esta forma, los precios generales de 30 euros para preferencia, 25 para grada numerada y 10 para el fondo pasarán a ser de 20, 15 y 10 euros con la posibilidad además de que con cada entrada para adulto entre de forma gratuita un niño menor de 12 años.
Como no podía ser de otra manera los socios no pagarán suplemento a mayores y disfrutarán de la misma ventaja pudiendo acceder con su carnet un niño de manera totalmente gratuita.
Muchos alicientes
El encuentro no solo permitirá ver a uno de los grandes equipos de Europa en el parqué del Palacio, sino que además para recibir de nuevo en León a dos nombres importantes de la historia del club ademarista como Kasper Hvidt y Antonio García.
Será el primero el que viva la jornada más especial, y es que el guardameta danés que disputó cuatro temporadas con la camiseta del Ademar y fue pieza clave de uno de sus grandes hitos históricos como es el caso del título de liga Asobal en 2001 además de la Copa del Rey de 2002, se despedirá del balonmano a final de temporada.
Es por eso que tendrá una última oportunidad de visitar la pista de uno de los equipos de su vida y a buen seguro recibirá el homenaje de una afición que vibró con él en la portería.