Las TIC deben ampliar sus plantillas un 30% pero no encuentran profesionales

La facturación de este sector asciende a 200 millones y espera contratar a mil personas

Sergio Jorge
08/01/2017
 Actualizado a 18/09/2019
El Parque Tecnológico acoge un buen número de las compañías TIC que están asentadas en León, que tienen más de 3.300 empleados. | MAURICIO PEÑA
El Parque Tecnológico acoge un buen número de las compañías TIC que están asentadas en León, que tienen más de 3.300 empleados. | MAURICIO PEÑA
Las empresas especializadas en tecnologías de la información y la comunicación (TIC) de la provincia de León necesitan con cierta urgencia ampliar sus plantillas para seguir con su ritmo de crecimiento actual. Según estima el presidente de la Asociación Leonesa de Empresas de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (Aletic), Luis Miguel Castro, este incremento del empleo debe ser del 30% durante este año 2017, lo que supondría incorporar al sector a cerca de mil personas ya que actualmente da trabajo a 3.300 profesionales en toda la provincia.

Unas cifras que explican con certeza que es uno de los sectores más pujantes de la provincia, con más de 375 compañías que en la mayoría de los casos tienen parte de su actividad fuera de la provincia e incluso fuera de España, pero siempre con el asentamiento principal en León. Eso se traduce en multitud de beneficios, puesto que la facturación asciende ya a 200 millones de euros, pero se encuentran precisamente con una barrera que puede lastrar esta tendencia al alza que es cada vez mayor: la falta de trabajadores especializados en el sector para así seguir creciendo.

«En las TIC no tenemos un problema de retención de empleo, porque normalmente los trabajadores se quedan varios años, sino que es difícil encontrar profesionales», reconoce Castro, que no duda en afirmar que la falta de este tipo de expertos puede lastrar el desarrollo de estas compañías, que «o crecen o mueren, nunca pueden mantenerse sin cambios en este sector».

Castro incide en el hecho de que «hay cada vez más necesidad de contratar y menos personas para ello».

Los dos perfiles principales que demandan las empresas leonesas son los de desarrollo de software y todo lo relacionado con la ciberseguridad, dos cuestiones básicas para el mundo de las TIC y que son difíciles de cubrir puesto que «hay más demanda que oferta».

Y es que Castro reconoce que la mayoría de los profesionales que surgen de las facultades de Ingeniería Informática, como la que hay en la Universidad de León (ULE), no cubren las necesidades de las empresas del sector, por lo que la mayoría de los licenciados salen con trabajo una vez que obtienen el Grado.

Por eso desde Aletic se trabaja con la ULE para orientar en los perfiles requeridos por las empresas, aunque Castro apunta que «lo que importa es que tengan una buena base», ya que luego cada compañía requiere una especialización totalmente distinta, dependiendo del sector con el que trabaje y también los programas y dispositivos con los que desarrolla sus productos o servicios profesionales.

También se colabora con la Fundación General de la ULE y la Empresa (Fgulem), que proporciona de forma más directa los recién titulados que pueden ser contratados por las TIC de León.

Castro señala también que aunque los jóvenes que surgen cada año de la universidad no estén formados al 100% en lo que necesitan las empresas, «hay un margen de unos cuatro meses para que puedan ser rentables». Esto se debe a que al principio van tomando experiencia en pequeñas unidades de la compañía pero según pasa el tiempo van adquiriendo responsabilidades mayores, por lo que a partir de este periodo es cuando ya empiezan de media a generar beneficios para la sociedad.

Esta dificultad para encontrar profesionales afecta a las empresas del sector en la provincia, pero es un problema general en España. Y aunque el beneficio es ante todo para la economía de la provincia, ya que aquí están más de 375 empresas TIC asentadas, pagando impuestos y generando riqueza, Castro apunta que a algunas compañías no les queda más remedio que contratar a profesionales que trabajan desde sus casas y están viviendo en otras provincias e incluso en el extranjero.
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