Teletienda electoral

25 de Abril de 2019
Las expectativas nunca fueron buenas, sobre todo porque casi nunca se cumplen. Esos grandes indecisos que dicen las élites que no tienen el voto concretado y que no se sabe bien, si irán a votar o por el lado contrario, se quedarán en casa. Esos indecisos que trastocan las estadísticas y propician quebraderos de cabeza a los partidos políticos. A los indecisos iban dirigidos los dos debates televisivos que hemos visto esta semana en la televisión estatal y en la privada. La pugna por el voto, una motivación para sacar lo mejor o peor de los candidatos a la presidencia, en un show mediático más cercano a la teletienda que a un debate serio. En el minuto de oro concedido por las dos cadenas televisivas, los candidatos si hubieran vendido una fregona, un aparato para limpiar los cristales o cualquier producto de sex-shop, seguramente les hubiese comprado algo, porque la planta que tenían era para ello. Sonrisas de anuncio de pasta de dientes, tono de voz muy adecuado para la televenta y slogans variopintos que iban del silencio de Rivera a la España de la ultra derecha. Y al igual que en el telemarketing, muchas gráficas sobre los beneficios y desventajas de un producto que aseguraban la subsistencia de España. Muchos dimes y diretes, acusaciones, tu has dicho, yo no he dicho, descalificaciones y pocas propuestas en firme. Si en todo esto tuviéramos que buscar ya no solo un ganador, alguno de los candidatos que se salve con dignidad, ese fue Pablo Iglesias y puede estar en consonancia con su programa o no, pero mantuvo la talla en todo momento, apeló a la conciencia de los ciudadanos buscando los acuerdos con todas las formaciones, dibujando un nuevo escenario político y concretando su programa sin tapujos, de los demás, pues nada nuevo, mucho juego y caras de poker en un intento por no defraudar a la audiencia. Díganme ustedes si es necesario que nuestros políticos tengan que usar coches de alta gama, nuestros representantes son nuestros empleados, nosotros les pagamos para que hagan algo y se burlan de todo apareciendo con automóviles a los que muy pocos pueden dar alcance. Eso sí, tenemos que apretarnos los bolsillos, subidas de impuestos y una leyes que por cierto, poco benefician a los de a pie de calle. Mejor que se dediquen al Vibroshapper, el Fast Slicer, Sauna Reducer, Express Cooker o el Pajillator, seguramente tendrían más éxito en esta empresa. Ahora en periodo de reflexión, no se lo que harán ustedes, eso sí, les invito que visiten la teletienda.