¿Médico de la inseminación?

25 de Septiembre de 2016
Ya marcharonlos turistas rurales (antiguos veraneantes, antes de que se impusiera la norma de que para ser importante había que tener, por lo menos, dos nombres)y al convertirse los pueblos de la ruralidad en Centros de Interpretación de los Pardales resulta que las tertulias de por la noche en los bares las carga el diablo y, como decían los antiguos, uno no se puede imaginar "en qué darán (o pararán en caso de trisílabos)".

Cualquier cosa que diga el Parte de la televisión –con excepción de El Tiempo, que se escucha con la misma fe que cuando Don Alejandro traía un predicador con barbas para Las Siete Palabras del día de Viernes Santo–, vuelvo al suco del Parte, que me esnorto, pues resulta que todo puede ser cuestionado, matizado, analizado, cierto es que sin seguir los códigos éticos del periodismo que recomienda la alcaldesa Carmena.

Sin ir más lejos, que hay que volver y la gasolina está cara, ayer dijo la tele en el descanso del fútbol que había quedado embarazada una mujer de 61 años y empezó el análisis, que Tere la de Jesús no lo acababa de ver claro.

- ¿Pero será de veterinario (de la inseminación), eso un paisano ya no lo hace?
- Habrá médicos también de eso.
- ¿Yqué ponen un trapo rojo en la ventana para que entre con la pipeta?
- Llamarán por teléfono, mujer.
- ¿Y cuándo se le llama, porque al veterinario se le avisa cuándo ves que la vaca está tora?

Pa habernos matao. Yo qué sé.