Un castillo como el Ademar, clasificado para la ‘Champions’ del balonmano no lo olvidemos, se asienta sobre bases mucho más anónimas que los Costoya, Cupara o Carou. Perono menos importantes.
Como Javi.
¿Quién? Javi. ¿Qué? Segundo entrenador de los cadetes del Ademar que acaban de ganar la medalla de bronce en los campeonatos de España; es decir, la mano derecha de Juanín con estos chavales, quien lleva las riendas cuando el primer entrenador tiene compromisos como jugador en activo. «Es un privilegio y un orgullo trabajar con Juanín».
Tanto que Javi le debe arrancar horas al día para estar con los chavales, para entrenar. «Por la mañana trabajo en el ayuntamiento y por las tardes ayudo a mis padres, que tenemos el Bar Begoña... y ahora el Begoña II. Le quito tiempo al descanso y al ocio porque me encanta el balonmano, primero jugarlo y ahora vivirlo con los chavales».
- Un clásico el Begoña, ahí en la puerta delHúmedo, con vistas a dos calles ¿Qué sientes cada vez que escuchas a cualquiera eso de que lo que recuerda de León es el Barrio Húmedo, las tapas...?
- Es un orgullo escucharlo y trabajamos para que siga siendo así, al menos en el Begoña...
- ¿Se nota lo de la Capitalidad?
- Se notan muchas cosas para que se diga que estamos de moda. Se notó el AVE, gente que aunque solo venga a pasar unas horas no deja de visitar el Húmedo; se notó el ascenso de la Cultural, es una pena que sólo haya estado un año y vuelva a descender.
- Pero tú eres más de balonmano.
- Por supuesto, no lo dudes, pero estábamos hablando de hostelería y hay que reconocer que los domingos de partido se nota un montón y ya no te digo cuando vienen el Sporting y equipos así.
Y se va. Los chavales esperan. El maestro le sonríe. Javi.
Como Javi.
¿Quién? Javi. ¿Qué? Segundo entrenador de los cadetes del Ademar que acaban de ganar la medalla de bronce en los campeonatos de España; es decir, la mano derecha de Juanín con estos chavales, quien lleva las riendas cuando el primer entrenador tiene compromisos como jugador en activo. «Es un privilegio y un orgullo trabajar con Juanín».
Tanto que Javi le debe arrancar horas al día para estar con los chavales, para entrenar. «Por la mañana trabajo en el ayuntamiento y por las tardes ayudo a mis padres, que tenemos el Bar Begoña... y ahora el Begoña II. Le quito tiempo al descanso y al ocio porque me encanta el balonmano, primero jugarlo y ahora vivirlo con los chavales».
- Un clásico el Begoña, ahí en la puerta delHúmedo, con vistas a dos calles ¿Qué sientes cada vez que escuchas a cualquiera eso de que lo que recuerda de León es el Barrio Húmedo, las tapas...?
- Es un orgullo escucharlo y trabajamos para que siga siendo así, al menos en el Begoña...
- ¿Se nota lo de la Capitalidad?
- Se notan muchas cosas para que se diga que estamos de moda. Se notó el AVE, gente que aunque solo venga a pasar unas horas no deja de visitar el Húmedo; se notó el ascenso de la Cultural, es una pena que sólo haya estado un año y vuelva a descender.
- Pero tú eres más de balonmano.
- Por supuesto, no lo dudes, pero estábamos hablando de hostelería y hay que reconocer que los domingos de partido se nota un montón y ya no te digo cuando vienen el Sporting y equipos así.
Y se va. Los chavales esperan. El maestro le sonríe. Javi.