– Te veo ensimismado, Ulpiano.
– Estaba mirando esta mariposa que me recuerda a una flor. Me recuerda…
– Mecanismo extraño el de los recuerdos. Algunos son agujas que se clavan y nos hacen tatuajes evanescentes en el alma. Otros perduran como la piedra. Quiero creer que esos son los que traen paz.
– La memoria es selectiva, Magister.
– Y es el cajón de sastre de la existencia. Sin el recuerdo propio no hay identidad; sin el recuerdo en otros no hay posteridad. No recordar y ser olvidado es un Bloody Mary realmente jodido, amigo. Desgracia y castigo a partes iguales.
– ¿Y qué se puede hacer?
– La memoria es un perro mal entrenado: le tiras un palo y te trae cualquier cosa. Sólo se me ocurre dejar escrito con letras de molde que una vez vivimos, Ulpi… que una vez vivimos.
– Estaba mirando esta mariposa que me recuerda a una flor. Me recuerda…
– Mecanismo extraño el de los recuerdos. Algunos son agujas que se clavan y nos hacen tatuajes evanescentes en el alma. Otros perduran como la piedra. Quiero creer que esos son los que traen paz.
– La memoria es selectiva, Magister.
– Y es el cajón de sastre de la existencia. Sin el recuerdo propio no hay identidad; sin el recuerdo en otros no hay posteridad. No recordar y ser olvidado es un Bloody Mary realmente jodido, amigo. Desgracia y castigo a partes iguales.
– ¿Y qué se puede hacer?
– La memoria es un perro mal entrenado: le tiras un palo y te trae cualquier cosa. Sólo se me ocurre dejar escrito con letras de molde que una vez vivimos, Ulpi… que una vez vivimos.