La Dirección Provincial de Educación revisará la solicitud de la familia de la niña Alejandra para que pueda matricularse en el colegio Peñalba de Ponferrada, tal y como desean sus padres. La pequeña tiene discapacidad visual cerebral, un retraso madurativo severo y un trastorno de comunicación y la Inspección Educativa y la Dirección Provincial de Educación han rechazado la petición y le asignanotro colegio más alejado de su casa, a 8 kilómetros, La Cogolla, en Fuentesnuevas, ya que consideran tiene los medios adecuados para ella. Su familia no opina así. Creen que Peñalba es el colegio de referencia para niños con problemas de comunicación, y alumnos con discapacidad auditiva. Y además está cerca de su casa.
Hace unos días, su familia dio a conocer su caso a través de redes sociales, haciendo pública la carta que han enviado a la Dirección provincial de educación solicitando que revisen su caso. «Hemos elegido un colegio cercano a mi casa y al trabajo de mamá, que además es referente para niños con diversidad funcional auditiva y con trastornos de comunicación como el que yo tengo, y que cuenta con recursos suficientes y un área de infantil sin barreras arquitectónicas. Sólo habría que añadir un cuidador, Auxiliar Técnico Educativo, para que yo pueda estar incluida en ese cole. Y además si no quieren ponerlo, como tengo asistente personal, facilitado por los Servicios Sociales de la comunidad, podría ir conmigo a clase para facilitar mi acceso a la educación tal y como dicen las leyes que lo regulan. Ya está yendo conmigo a la Escuela Infantil Municipal de Ponferrada y me ayuda mucho».
Eran las palabras que trasladaban como en boca de la niña, para intentar tocar la sensibilidad de quien deba valorar el asunto y también de la opinión pública, si bien está también cargada de argumentos que sus padres consideran legítimos.
La Dirección Provincial de Educación ha recibido a los padres de Alejandra y se han comprometido “a revisar el caso”, explica Lorena, su madre «y a intentar llegar a la mejor solución, pero aún no hay nada decidido, tendremos que esperar».Han salido «contentos», dice la madre, de la reunión, porque «nos han escuchado y nos han tratado bien», con lo que en los próximos días esperan la respuesta. Los familias deben saber en pocos días donde deben matricular a sus hijos antes del 15 de junio, tras superar el primer trámite de preinscripción.
Así, desde el equipo de Orientación e Inspección Educativa están actualizando el informe de Alejandra, ya que su familia ha renunciado al fisioterapeuta que, según el informe anterior, precisaba la niña, y que su familia entiende que no precisa y que podía condicionarle en la elección del colegio. También , explica su madre, en la propia reunión “pudieron ver que no es una niña discapacitada motórica y que La Cogolla, donde le quieren asignar desde la administración, es centro de referencia para este tipo de discapacidades.
El caso de Alejandra lleva a fecha de este miércoles alrededor de 37.000 firmas ciudadanas de apoyo en la plataforma de internet Change.org.
Hace unos días, su familia dio a conocer su caso a través de redes sociales, haciendo pública la carta que han enviado a la Dirección provincial de educación solicitando que revisen su caso. «Hemos elegido un colegio cercano a mi casa y al trabajo de mamá, que además es referente para niños con diversidad funcional auditiva y con trastornos de comunicación como el que yo tengo, y que cuenta con recursos suficientes y un área de infantil sin barreras arquitectónicas. Sólo habría que añadir un cuidador, Auxiliar Técnico Educativo, para que yo pueda estar incluida en ese cole. Y además si no quieren ponerlo, como tengo asistente personal, facilitado por los Servicios Sociales de la comunidad, podría ir conmigo a clase para facilitar mi acceso a la educación tal y como dicen las leyes que lo regulan. Ya está yendo conmigo a la Escuela Infantil Municipal de Ponferrada y me ayuda mucho».
Eran las palabras que trasladaban como en boca de la niña, para intentar tocar la sensibilidad de quien deba valorar el asunto y también de la opinión pública, si bien está también cargada de argumentos que sus padres consideran legítimos.
La Dirección Provincial de Educación ha recibido a los padres de Alejandra y se han comprometido “a revisar el caso”, explica Lorena, su madre «y a intentar llegar a la mejor solución, pero aún no hay nada decidido, tendremos que esperar».Han salido «contentos», dice la madre, de la reunión, porque «nos han escuchado y nos han tratado bien», con lo que en los próximos días esperan la respuesta. Los familias deben saber en pocos días donde deben matricular a sus hijos antes del 15 de junio, tras superar el primer trámite de preinscripción.
Así, desde el equipo de Orientación e Inspección Educativa están actualizando el informe de Alejandra, ya que su familia ha renunciado al fisioterapeuta que, según el informe anterior, precisaba la niña, y que su familia entiende que no precisa y que podía condicionarle en la elección del colegio. También , explica su madre, en la propia reunión “pudieron ver que no es una niña discapacitada motórica y que La Cogolla, donde le quieren asignar desde la administración, es centro de referencia para este tipo de discapacidades.
El caso de Alejandra lleva a fecha de este miércoles alrededor de 37.000 firmas ciudadanas de apoyo en la plataforma de internet Change.org.