La lesión de Donoso, mucho más grave de lo esperado

El extremo de la Deportiva no podrá retornar esta campaña y estará más de 6 meses KO al ser finalmente "completa" su rotura del cruzado y ser operado

J.C.
12 de Marzo de 2019
Guille Donoso, durante su presentación con la Ponferradina. | L.N.C.
De decir adiós a la liga regular pero existir la opción de que pudiera regresar para un hipotético ‘playoff’ de ascenso, a no sólo despedirse por completo de esta temporada sino también de poder arrancar con normalidad la próxima.

Es la consecuencia del agravamiento del diagnóstico del extremo de la Ponferradina Guille Donoso, cuya lesión es finalmente mucho más grave de lo esperado y deberá estar más de seis meses alejado de los campos.

Y es que, si inicialmente desde el conjunto berciano señalaban que tenía una «rotura parcial del tercio medio distal del cruzado anterior de su rodilla derecha»; este martes el nuevo parte médico corregía y apuntaba que existe una «rotura completa de ligamento cruzado anterior».

Se dobla el periodo de baja con el paso de rotura parcial a completa, habiendo sido ya operado con éxito el jugador el pasado 8 de marzo por el doctor Maestro en Gijón.

Tras llegar en Navidad, sólo ha disputado 40 minutos antes de lesionarse la rodilla en un entrenamiento Después del postoperatorio inmediato iniciará tratamiento fisioterápico, no pudiendo ya volver a jugar con la Ponferradina salvo que se renegocie su contrato puesto que había llegado en Navidad como cedido hasta final de temporada por el Lugo.

En cualquier caso, el largo periodo de baja da la opción a la Ponferradina de buscar un sustituto e inscribirle ocupando la ficcha de Guille Donoso, por lo que sus dirigentes están peinando el mercado para ver si consiguen encontrar algo que les convenza y que pueda reforzar al equipo hasta final de temporada.

Un ‘parche’ ante la mala fortuna que ha tenido Guille Donoso, que apenas ha podido disputar dos encuentros en su segunda etapa en el conjunto berciano. Tras salir desde el banquillo y jugar los últimos 20 minutos en dos encuentros seguidos frente a Bouzas y Coruxo, cuando su estado físico iba a más y apuntaba al once frente al Pontevedra, sufrió esa gravísima lesión de rodilla en uno de los últimos entrenamientos de esa semana.