'El fútbol ye muy fácil'

Por Fulgencio Fernández

16 de Enero de 2017
José Carrete recibe una camiseta firmada por toda la plantilla de la Cultural de manos de Felipe Llamzares y ante la mirada de Iván González. | DANIEL MARTIN
La tarde empezó bien, para mí, pues le ofrecían un homenaje a Pepe Carrete, uno de esos personajes que tengo en mi personal santoral de paisanos que hacen cosas y, además, juegan o entrenan al fútbol, en su caso.

Fui asiduo del Carlos Tartiere en aquel Oviedo donde Carrete era el dueño del 2, un lateral de antes de inventarse los carrileros;el de nuestro Marianín, Tensi, Javier, Galán... Pues os juro que el jugador que más veces levantó a la grada del Tartiere fue Carreta, El Tigre de Cabojal, cuando le daba un ataque de furia y sacaba a un tío dos metros por el aire; cuando recorría todo el campo detrás de Chechu Rojo llamándole de todo, cosas que no puedo poner aquí —eso de taparse la boca no iba con él —por haber simulado un penalty y el fino extremo del Athletic ya no sabía donde meterse o cuando salió de los límites del campoa seguir cubriendo a Cruyff mientras se ataba las botas. El holandés protestó, la grada le insistía, «¡quieto ahí!».
Cuando salían por la bocana las ‘patas torcidas de Carrete’ nunca faltaba un aplauso cerrado.

Y llegó a León (y Ponferrada)años después. «Los de Deportes», que se decía en los medios, le organizaron una cena en la que ‘El Tigre’ se explayó. Alguien quiso dorarle la píldora:

- Pepe, el fútbol no fue justo contigo, jugaste en Primera, fuiste internacional y estás en Segunda B.

Miro agradeciendo el cumplido, sonrió como el viejo zorro que es, y al margen de un comentario sobre «la suerte que tuve con las muyeres con esta cara, que sólo se puede deber al fútbol», y que tampoco puedo reproducir de manera textual, añadió:«El fútbol ye muy justo. Yo le daba las patadas a Cruyff y estoy en Segunda B; Cruyff recibía las patadas y está en el Barcelona inventando el fútbol».

- Ya, pero tú...
- Mira, ¿te parece poco salvarme de acabar en una mina de la cuenca por jugar al fútbol, que mataba a Dios por jugar en la plaza de Cabojal gratis?
Me acordé de sus patas torcidas al ver a Munitis por la bocana, que es de la misma raza de tren inferior, y me dije:«No sé, estos de las patas torcidas...».

Y otra alegría, colas en las taquillas;oro para Catar, aunque no me alegre por los que se perdieron medio tiempo vaya usted a saber porqué.

Y las gradas que parecían de un campo de fútbol de verdad, con gente, bastante gente, hasta de Ponferrada. Me tocó sentarme al lado del singular Tejeda, fundador, director, fotógrafo, maquetador y líder de opinión del digital esleón diario, que también hizo (bueno, el intento no está penado) carrera política en un partido que lideraban Vestrynge y Martín Beaumont, «que ahora no me coge el teléfono y dice que no se acuerda de mí».

Viene a cuento Tejeda de la asistencia de público porque en una colaboración mía en época electoral fui a «cubrir» un mitin de Tejeda y un líder regional del partido. Estaba yo solo en un pabellón lleno de sillas vacías, el Margarita Ramos. ¿Está gente no tendrá familia?, me preguntaba, lo mismo que me preguntaba durante años en los partidos de aquella Cultural que no llenaba ni los baños al descanso. Claro que no era ayer el día de preguntar por la familia pues no había ni un leonés entre los 22 titulares. Y después tampoco.

YTejeda, recordando aquel mitin para un solo seguidor, soñaba:«¡Qué bonito tiene que ser estar en un campo lleno!».

Andábamos en esos vericuetos cuando ya salían las ‘patas torcidas’ de Munitis por la bocana con Gonzalo Colsa de primo de Zumosol. De la Barrera como siempre, como un pincel, cuando él va el esteticien sí está, no le pasa como a mí. Y a jugar.

¿El partido? Ya os lo dicen en páginas anteriores, echándole emoción a la cosa que para eso somos líderes, pero cuando un partido acaba en cero cero sólo es bueno para la cerveza. Y por la Guardia Civil que si no...