Los ríos leoneses vuelven a sus cauces

La CHD ha retirado la alarma de toda la provincia, que mantiene algunos niveles de alerta pero con caudales claramente descendentes

Ical
25 de Diciembre de 2019
Cimanes de la Vega, una de las localidades más afectadas por las riadas de la pasada semana. | T.G.
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene este miércoles ya solo una estación de aforo en estado de alarma y otras 16 en alerta, todas ellas a la baja, con lo que prácticamente se da por cerrado el episodio de avenidas e inundaciones que ha acompañado a la cuenca durante la última semana, y que ha generado daños materiales en las zonas bajas de algunos de los ríos más importantes de la Comunidad, como en Arlanza, Esla, Órbigo y Pisuerga, además del fallecimiento de un varón al caer al agua con su tractor.

En este sentido, el organismo de cuenca establece en alarma el Carrión, a su paso por Celadilla del Río (Palencia), donde el nivel no alcanza el metro de altura y transita con 64,65 metros cúbicos por segundo en estos momentos.

Además, están en alerta, pero claramente a la baja o estables, el propio Carrión en otros dos puntos, el Duero en otros cuatro, y el Esla en tres, al igual que el río Órbigo. Con la misma categoría se encuentran el Arlanzón, a la salida del embalse de Úzquiza (Burgos), el Tuerto, en el pantano de Villameca, el Luna, en la salida de Barrios de Luna, y el Duero, en el de la Cuerda del Pozo, dada la posibilidad que ofrecen estas infraestructuras para almacenar y regular el agua.

El río Duero también se encuentra estabilizado y en vía descendiente, ya que a su paso por Herrera de Duero (Valladolid) su caudal es de 212 metros cúbicos por segundo y en Toro (Zamora) de 979 metros cúbicos por segundo, cuando supero el millar.