Con el verano a la vuelta de la esquina, el aumento de las temperaturas y el fin de las lluvias en la mayor parte del territorio nacional, el consumo de agua se dispara y todas las miradas se centran en el estado de los embalses.
En Ponferrada el período estival se afronta con calma. Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, el embalse de Bárcena, a dos semanas del comienzo del verano, se encuentra al 88% de su capacidad y es el segundo pantano con más reservas de toda la cuenca hidrográfica.
Solo el de Belesar, con 543,71 hectómetros cúbicos acumulados, supera los 304,93% del pantano berciano, buenas cifras para evitar posibles restricciones durante los próximos meses.
Es la vertiente noreste de la cuenca la que mejor preparada lleva a la temporada estival. Además de la buena salud de Bárcena y Belesar, el embalse de Vilasouto, en Lugo, se encuentra al 95% de su capacidad y el de Os Peares al 98%.
En el extremo sur y oeste. Albarellos, a un 56,91% y Salas, que tampoco llega al 60%, muestran la otra cara de la moneda.
Y es que el estado del pantano de Bárcena es la excepción y no la regla en España. La reserva media en los pantanos españoles es de un 59’90%, casi veinte puntos menos que en la misma semana del año pasado, cuando los embalses se encontraban al 72% de su capacidad y muy lejos también de la media de reservas de los diez últimos años.
En Ponferrada el período estival se afronta con calma. Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, el embalse de Bárcena, a dos semanas del comienzo del verano, se encuentra al 88% de su capacidad y es el segundo pantano con más reservas de toda la cuenca hidrográfica.
Solo el de Belesar, con 543,71 hectómetros cúbicos acumulados, supera los 304,93% del pantano berciano, buenas cifras para evitar posibles restricciones durante los próximos meses.
Es la vertiente noreste de la cuenca la que mejor preparada lleva a la temporada estival. Además de la buena salud de Bárcena y Belesar, el embalse de Vilasouto, en Lugo, se encuentra al 95% de su capacidad y el de Os Peares al 98%.
En el extremo sur y oeste. Albarellos, a un 56,91% y Salas, que tampoco llega al 60%, muestran la otra cara de la moneda.
Y es que el estado del pantano de Bárcena es la excepción y no la regla en España. La reserva media en los pantanos españoles es de un 59’90%, casi veinte puntos menos que en la misma semana del año pasado, cuando los embalses se encontraban al 72% de su capacidad y muy lejos también de la media de reservas de los diez últimos años.