La Audiencia de León absolvió al alcalde de Gradefes, Amador Aller, así como al secretario y al arquitecto municipal de los delitos de prevaricación administrativa y falsedad documental de los que se les acusaba tras denegar el Ayuntamiento una licencia de cierre a unos vecinos al entender el Consistorio que la obra invadía un camino público.
Tras tres años de proceso que calificó de “calvario”, Aller lamentó que la denuncia “mezcla intereses políticos” tanto de los denunciantes, como de los testigos, entre los que se encuentra la anterior alcaldesa del municipio, Ana Isabel Ferreras.
A ella le reprocha el actual regidor que declarase en el juicio que no existía tal camino pese a que su firma aparece en un documento relacionado con una petición anterior de vallado.
Según Aller, la existencia de un camino público que resultaría invadido con el cerramiento de la parcela le obligó a “proteger un bien de titularidad pública frente a una supuesta invasión de un particular”. Al respecto, el alcalde critica que “no todo vale en esta vida para conseguir los fines que uno se propone”.
Tras tres años de proceso que calificó de “calvario”, Aller lamentó que la denuncia “mezcla intereses políticos” tanto de los denunciantes, como de los testigos, entre los que se encuentra la anterior alcaldesa del municipio, Ana Isabel Ferreras.
A ella le reprocha el actual regidor que declarase en el juicio que no existía tal camino pese a que su firma aparece en un documento relacionado con una petición anterior de vallado.
Según Aller, la existencia de un camino público que resultaría invadido con el cerramiento de la parcela le obligó a “proteger un bien de titularidad pública frente a una supuesta invasión de un particular”. Al respecto, el alcalde critica que “no todo vale en esta vida para conseguir los fines que uno se propone”.