Sergio Sánchez y Victoria Santamaría reinan en la Transcandamia

Cerca de 500 valientes aceptaron un año más el reto de una carrera ya clásica en el calendario

J. A.
15/01/2017
 Actualizado a 19/09/2019
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No solo no apareció la nieve sino que la sexta edición de la Transcandamia fue una de las más soleadas que se recuerdan, y es que si bien el frío fue protagonista, no lo fueron otros elementos habituales de la misma como el barro que permitieron a los cerca de 500 valientes que tomaron la salida desde Las Lomas disfrutar de una carrera rápida y sin la dureza añadida que aporta la meteorología.

Sergio Sánchez, cuya presencia sorprendió y generó dudas sobre su posible rendimiento entre los habituales de la montaña, dejó claro en la carrera que es sin duda un ‘todoterreno’.

En su primer contacto con la montaña el gordonés arrasó. Durante los primeros kilómetros Alberto González, que defendía título, le siguió muy de cerca si bien en la zona final algún problema no solo le alejó del ganador sino que no le permitió ni siquiera entrar en el podio.

Sergio Sánchez llegó solo a la ‘Anibalada’, la rampa con una pendiente del 30% que significa el final de la carrera y es su gran seña de identidad y allí recibió la ovación de un público que abarrotó una zona que supone un gran atractivo para los cada vez más corredores populares que llegan a León para disfrutar de la que es la primera gran carrera del año.

Por detrás del de Ciñera y poco distanciados entre sí llegaban a meta el zamorano Santiago Mezquita y Pablo Pinillas, que cerraban el podio de la prueba.

En la categoría femenina, la gran favorita, campeona autonómica del Kilómetro Vertical, Victoria Santamaría, se hacía con la victoria tras liderar prácticamente toda la carrera. Tras ella, Celia Lorenzo ySusana Fernández completaban el podio.

Con la carrera ya resuelta, fue entonces el momento para los cientos de protagonistas anónimos de la carrera. Populares que tras semanas de entrenamiento, muchos de ellos habituales de Las Lomas, afrontaban las mismas cuestas, senderos y bajadas que durante cualquier otro día pero con la adrenalina extra de llevar un dorsal colgado.

Además, y en la espera entre salida y llegada de los ‘mayores’, niños de todas las edades participaron también de la carrera en la llamada ‘Transcaboys’, en la que con circuitos adaptados disfrutaron también de la montaña y de los metros finales, los más espectaculares de la carrera.

El futuro de los corredores está asegurado como lo está el de una carrera que sigue creciendo en popularidad y cuya demanda demuestra que los dorsales para la misma se agotaron en apenas ocho horas. León ya siente como suya la Transcandamia.
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