Los trabajadores de FCC mantienen "en suspenso" la huelga de basura de Ponferrada

La asamblea de trabajadores del servicio de limpieza viaria y recogida de basuras en Ponferrada, adjudicado a la empresa FCC, ha decidido este viernes mantener “en suspenso” la convocatoria de huelga anunciada el mes pasado a la espera de que el pleno del Ayuntamiento de la capital berciana ratifique el preacuerdo para un nuevo convenio colectivo alcanzado entre los responsables de la compañía y los representantes del comité de empresa a mediados de la semana pasada.

Los empleados ya decidieron el domingo pasado suspender la huelga, que debía haber empezado este lunes, y dar “un voto de confianza” a los responsables municipales en la resolución del conflicto. Al respecto, el concejal de Medio Ambiente, Roberto Mendo, y la edil de Hacienda, Amparo Vidal, acudieron a la asamblea y comunicaron a los trabajadores que el Consistorio dispone de “informes favorables del departamento jurídico y del de contratación” para dar su visto bueno al acuerdo, tal y como explica el presidente del comité, Marco A. Varela.

Cabe recordar que el preacuerdo alcanzado por la parte empresarial y la social establece que "la empresa condiciona la validez y eficacia del presente preacuerdo, así como el convenio resultante, a que se legitime para su firma por parte del Ayuntamiento". Al respecto, la empresa busca la legitimación municipal para un preacuerdo que se ha negado a negociar durante semanas, después de que el pasado mes de julio una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) anulase el contrato municipal firmado en 2014.

En ese sentido, la convocatoria de huelga queda “suspendida” hasta que el preacuerdo se corrobore por parte de los distintos grupos en un pleno municipal, “la única vía de legitimación posible por parte del Ayuntamiento”, según Varela, que adelanta que los trabajadores tienen el “compromiso” de mantener la protesta en suspenso, “a no ser que cambien drásticamente las condiciones”.

Al respecto, el presidente del comité, que reconoce la “expectación” de los trabajadores por las explicaciones que les pudieran transmitir los responsables municipales, vaticinó que “la huelga no se reactivará” aunque exista la posibilidad legal de ponerla en marcha en un plazo de 24 horas. Los trabajadores esperan que el asunto se incluya en el orden del día del próximo pleno municipal, previsto para finales de mes. “No nos queda otro remedio”, asegura Varela, que confia en que el pleno haga efectivo el preacuerdo.