Los incendios de Vega y Candín calcinan casi 200 hectáreas

El de Balouta, iniciado hace una semana, ha alcanzado las 130 ha.

N. González
01/08/2015
 Actualizado a 06/09/2019
Zona de pinares en Vega de Espinareda, arrasada por el incendio originado el pasado fin de semana. | César Sánchez (Ical)
Zona de pinares en Vega de Espinareda, arrasada por el incendio originado el pasado fin de semana. | César Sánchez (Ical)
Los incendios ocurridos en los últimos días en los municipios de Vega de Espinareda y Candín, el primero de los cuales también afectó al municipio de Sancedo, han calcinado casi 200 hectáreas, según los cálculos anunciados este viernes por el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta.

El fuego ocurrido en el municipio de Candín, en concreto en los montes de la localidad de Balouta, ha estado activo durante una semana, ya que su inicio se produjo el jueves 23 de julio.

Aunque este fuego se dio por controlado varias veces, su reproducción obligó a continuas actuaciones en la zona. Es, en superficie forestal, el más grave de los dos, ya que ha calcinado 130 hectáreas, según datos del Servicio de Medio Ambiente.

La superficie quemada estaba conformada principalmente por matorral, con presencia de brezo y escoba, aunque también había en la zona varias matas de roble.

«Era una zona muy en pendiente y el fuego se reprodujo varias veces, aunque la mayor parte de superficie afectada es de brezo», explica el alcalde de la localidad, José Antonio Álvarez Cachón.

Aunque la superficie quemada sea mayor en el caso de Balouta, los mayores daños económicos los ha producido el incendio que ha afectado a las localidades de Vega de Espinareda, en concreto en la zona de El Espino y Espinareda, y también en el municipio de Sancedo, y que los responsables de Medio Ambiente calculan que ha arrasado 40 hectáreas.

Este incendio, que comenzó el pasado fin de semana, ha supuesto un importante perjuicio económico para muchos productores forestales, ya que la mayor parte del monte quemado eran plantaciones de pinos y también fincas de castaños particulares. Fue, además, un fuego en el que se decretó el nivel máximo de alerta, debido a la cercanía que las llamas llegaron a alcanzar con las viviendas de los vecinos de la zona. Esto hizo que se desplazaran al lugar una gran cantidad de medios humanos y materiales, entre ellos la Unidad Militar de Emergencias, UME, que movilizó un dispositivo de 62 operarios.

Se ha detectado que este fuego tuvo cuatro focos distintos, en los que se inició de forma casi simultánea, por lo que la Guardia Civil investiga ya su posible origen intencionado.

«Ahora tendremos que ver cómo queda la zona y estudiaremos si hay posibles bolsas de ayudas para la repoblación de algunos lugares», afirma el alcalde de Vega de Espinareda, Santiago Rodríguez.

Ambos incendios han dañado zonas situadas en la Reserva de la Biosfera de los Ancares Leoneses, de gran valor ecológico y faunístico.
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