Ya que nos queda ‘poca’ Navidad... que sea leonesa

‘El Ramo Tradicional Leonés’ es el título de la carpeta que esta tarde (17.45 horas) se presenta en el Museo Etnográfico Provincial de Mansilla con el objetivo de divulgar qué es el ramo leonés y acercarlo a todos los leoneses

Fulgencio Fernández
19/12/2020
 Actualizado a 19/12/2020
Un ramo leonés instalado en la plaza de las Cortes. | MAURICIO PEÑA
Un ramo leonés instalado en la plaza de las Cortes. | MAURICIO PEÑA
A la misma velocidad que Papá Nöel le ganaba terreno en los sueños de los niños a los Reyes Magos una serie de costumbres navideñas importadas le iban ganando protagonismo a otras tradicionales de esta tierra. Y así, por ejemplo, fue cayendo en el olvido en el Ramo Tradicional Leonés; si bien es cierto que ya hace unos años que diversos colectivos han comenzado a reivindicarlo y ha ido ganando presencia.

En esta línea de darle presencia y divulgar su historia el Museo Etnográfico Provincial, a través del Instituto Leonés de Cultura, presenta esta tarde (a las 17.45 horas, en la sede del museo en Mansilla) una publicación cuyo objetivo es, explican, «dar a conocer qué es el ramo leonés, en qué ocasiones se exhibe o emplea, cómo se decora y qué tipo de cantos lleva aparejado». Se trata de una carpeta de carácter didáctico y con un interés sobre todo divulgativo. «Es una publicación pensada para todos los públicos».

Sus autores, Francisco Javier Lagartos Pacho, técnico superior del Museo Etnográfico Provincial; Carlos Luis Santos Martínez, etnógrafo y maestro, y Raquel Ordóñez Lanza, ilustradora y maestra, comentarán en la presentación de esta tarde todos los detalles de esta ‘Carpeta didáctica: El ramo tradicional leonés’, que viene a continuar la serie iniciada con la carpeta dedicada a la indumentaria popular de las comarcas de León y con otras publicaciones en las que, explican, «esencialmente priman el diseño, la imagen y la claridad de contenidos».

En la nota pública del ILC y el Etnográfico desvelan que «la carpeta ‘El Ramo Tradicional Leonés’ hunde sus raíces en la exposición temporal que con el título ‘Este ramo que traemos…’ se celebró en el Museo Etnográfico entre el 12 de diciembre de 2014 y el 31 de enero de 2015. La obra se remonta a los orígenes precristianos de la tradición del ramo, cuando este era una rama de árbol revestido de un carácter votivo relacionado con la fertilidad de la naturaleza y acompañado a veces de frutos y del fuego o de objetos encendidos. También se le atribuye un culto propiciatorio asociado a la solicitud de buenas cosechas. Con el paso del tiempo y la llegada del cristianismo, todos estos cultos fueron adaptados y asimilados por la nueva religión, conformando, poco a poco, lo que hoy conocemos como los rasgos más definitorios de esta manifestación cultural».

La publicación muestra la existencia de muchos tipos de ramos: el de cambio de estado, el de obra nueva, el patronal o votivo, el de menada, etcétera, con un significado y composición muy similar. Pero el ramo que con mayor fuerza ha llegado hasta nuestros días es el de Navidad. «En esta tradición podemos dividir dos partes fundamentales: la material y la inmaterial -expresan los autores-. La parte material se compone del soporte, normalmente de madera, vestido o policromado, y del que cuelgan ofrendas y adornos. Asociado a estas estructuras se encuentra una parte de oralidad (inmaterial) muy importante y cuya máxima expresión es el ‘canto del ramo’ que se lleva a cabo el día de Nochebuena, en la Misa del Gallo. El canto, normalmente, hace referencia al relato evangélico del Nacimiento y la Adoración de los pastores. Después se describen las ofrendas y en la despedida donde se felicita a los presentes».
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