Y llegó la primavera

La estación más deseada de todos los bercianos siempre fue la primavera, que con sus tiernos tallos y flores madrugadoras, nos decían a los jóvenes que pronto tendríamos la oportunidad de ir al río a bañarnos...

Ramón Cela
10/05/2020
 Actualizado a 10/05/2020
La celebración de la Fiesta del Maio es una tradición única en el Bierzo que hermana la comarca con Galicia. | CELA
La celebración de la Fiesta del Maio es una tradición única en el Bierzo que hermana la comarca con Galicia. | CELA
Los ‘Mallos’ Villafranquinos con ll saldrían, como decostumbre, el día primero del mes de mayo, después de haber dejado los chicos las flores en las puertas y ventanas de las mozas del lugar repartiendo poemas de amor: Mientras que si la chica está atenta y sale al balcón como simple curiosidad, siempre hace más ilusión a la que recibe las flores vigilada y agradecida en el interior por su madre que complaciente esboza una sonrisa de agradecimiento, mientras que los mozos que llevan flores para todas las chicasdisfrutan de ver las agradables sonrisas que les dedican las agraciadas por las flores y poemas.

En muchas ocasiones, la cosa ya está preparada y la moza contesta con otro verso y así, hacen las delicias del numeroso público que acompaña a los músicos y galanes. Todo esto, como es natural, siempre esta regado por un buen vino y, en muchas ocasiones, con las pruebas de rosquillas de anís o cualquier bocadito de dulce sabor.

Pero ya después de mucho cantar y vivir la noche, llega la hora del descanso y los chicos se van a descansar, que a primera hora hay que ir a buscar las ‘Cañaveiras’ para vestir a losMaios. Como también se les llama en Villafranca, pero lo importante es que llamándoles de una u otra manera, Los Maios, salen cada año, llueva o nieve, además coincide siempre el primero de mayocon la Fiesta del Trabajo.

Lo más divertido es ver como en cada barrio van buscando las ‘cañaveiras’. Ahora muchas chicas les acompañan, para que el coro de cánticos, sea mucho mejor y de paso divertirse, porque es una fiesta que consiste en saludar a las flores y a la primavera. Luego siempre termina, con un almuerzo grupal, en el que nunca faltan ni las empanadas ni el buen vino del Bierzo.

A la hora convenida, que casi siempre se sale desde los distintos barrios y se comienza a cantar y a tocar instrumentos de aire y cuerda con distintas estrofas que se entremezclan con el gallego y castellano, de tal manera que se dice:

‘Marzo airoso, abril chuvinoso/ sacan a o mayo, florido y hermoso./Este Maio señora é un mayo que andaba de pe./ Tire castañas señora María, tire castañas/ que as ten na cociña’.

Naturalmente, la señora de la casa, sale al balcón y arroja o unas monedas, frutas o confituras, por lo que, una vez vista la generosidad de la vecina, se le canta: ‘Esta casa es de hierro, donde vive un caballero./Esta casa es de cristal, donde vive un general’. O por el contrario , si es poco o nada, se le dice cantando, naturalmente: ‘Esta casa es de cartón donde vive un mari…/ Esta casa es de losa donde vive una roñosa’.
Pero lo habitual es que todos los vecinos contribuyan con algo y que los maios sigan cantando calle arriba o abajo, porque si se paran con demasiada frecuencia en convites, se puede llegar tarde a la cita en la Plaza Mayor, que es donde se reúnen todos los Maios, de ese año y se funden y confunden unos grupos y otros.

Lo más interesante, si cabe, para los forasteros que no están acostumbrados a estos actos de la llegada de la primavera, es cuando por las cuatro esquinas de la Plaza comienzan a llegar los maios y se entremezclan los cánticos de unos y otros. Luego se les tumba a todos en el suelo y, una vez en esta postura, se les canta. ‘Levántate Maio, bastante dormiste/ Pasó un burro y no lo sentiste’. Después de un buen rato se levantan con la lógica ayuda de las gentes y comienzan a caminar hacía el lugar donde les esperan las empanadas y el buen vino, mientras que las gentes participantes y no continúan varias horas con sus coronas de flores sobre sus cabezas y la sonrisa en sus labios, porque el espectáculo es digno de vivirlo.

Por el suelo van quedando ‘Cañaveira’ o ‘apiois’ como se les llama a estas ramas , en la vecina comarca de Valdeorras. Los maios van regando las calles de ‘cañaveiras’, sin otra intención que ir quitando incomodidad al atuendo amarrado con cuerdas , ramas y flores a su cuerpo, mientras que la primavera, impasible, sigue dando sus mejores aromas y colores a quienes los saben apreciar.El forastero, incrédulo, no comprende como esta Fiesta no está considerada como de Interés Turístico Provincial, aunque cuenta con este galardón y hasta Regional. Pero en Villafranca, se sabe perfectamente, que está en una esquina o Paraíso Olvidado de la provincia muchas veces o de la región.
Lo más leído