Velilla o el espíritu primitivo

Velilla de la Reina volvió a hacer gala de tradición este domingo de Carnaval. Los guirrios, los toros, la gomia y un gran elenco de personajes de lo más ancestrales y de orígenes dispares salieron a la calle para exhibirse ante los centenares de asistentes, al más puro antruejo rural, en una celebración que es, sin duda, uno de los carnavales tradicionales más reconocidos de la provincia leonesa, declarado de Interés Turístico Provincial y con gran valor etnográfico, antropológico y patrimonial. Y es que, el Antruejo de Velilla mantiene el espíritu de la autenticidad, de la fidelidad a una tradición que recupera algunos de los ritos más primitivos.

Por eso no es de extrañar que la celebración de este domingo fuera una de las más visitadas por los leoneses, en estos días de carnaval. Pero Velilla solo es la guinda del pastel de una celebración que se extiende por todo el municipio de Cimanes del Tejar. De hecho, la primera localidad en celebrar el antruejo fue el mismo Cimanes, que se suma a esta tradición recuperando, desde hace tan solo un lustro, a sus personajes más arcaicos.

Este domingo fue también el turno de Alcoba de la Ribera, que también forma parte ya del calendario carnavalero con una nueva representación del Antruejo, con un sinfín de personajes que volvieron a cobrar vida después de pasar años y años ‘enterrados’.