USE exige que se elimine el badén del paso de cebra del Castillo

El Grupo Municipal USE Bierzo exige al equipo de gobierno que tome medidas urgentes para solucionar los problemas de movilidad y accesibilidad con la colocación de un reductor de velocidad frente al castillo y el paso de peatones “situado erróneamente” a la altura del número 29 de la Avenida de Galicia.

USE pide que el badén frente al Castillo, justo antes del Puente García Ojeda en sentido de descenso, se elimine porque “incumple cualquier normativa”. Recuerda que la instrucción gubernamental sobre reductores de velocidad indica que en pendientes longitudinales superiores al 5% no deben colocarse este tipo de reductores. Por otra parte, las entradas y salidas de los pasos elevados han de estar entre un 5 y un 10% de pendiente. Según las mediciones efectuadas por USE, la pendiente longitudinal en el badén es del 9,4%, muy superior al 5% como máximo que dicta la instrucción para la colocación de reductores.

La pendiente en la bajada del reductor al que nos referimos es de 17,8%, también muy superior a lo establecido. “Todo ello está provocando innumerables molestias a los conductores, que constantemente rozan los bajos de los automóviles” . Además de la eliminación del badén, USE solicita que "se nos facilite el expediente ya que, más allá de criterios técnicos, es necesario saber si la reciente colocación de éste y otros pasos elevados en el entorno del Castillo requiere una inversión de 18.000 euros".

El caso del paso de cebra a la altura del n.º 29, colocado diez números después del solicitado por el Partido Regionalista del Bierzo, de la Avenida de Galicia , no sólo no se accede a la solicitud de Carballo, apunta sino que el paso de peatones que se está ejecutando unos metros más adelante “inclumple cualquier normartiva de accesibilidad, en un claro desprecio al conocimiento sobre esta materia”. Las pendientes laterales superan claramente el 10%, carece de baldosas de acercamiento al punto de cruce, y tampoco dispone de las preceptivas baldosas dotadas de botones rugosos que indican a las personas con discapacidad visual el punto de la calzada por el que han de cruzar, explica USE.

En palabras del portavoz Samuel Folgueral, ambas obras "van en contra de la racionalidad de la circulación, tanto rodada como peatonal en el caso de las personas con discapacidad”.