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Una UPL estabulada

17/10/2021
 Actualizado a 17/10/2021
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Al PSOE de Pedro Sánchez «le importa León, Zamora, Salamanca…». Y le importa, también, –fueron palabras de Javier Alfonso Cendón, el jefe provincial de los socialistas leoneses– Lugo, Orense, Jaén, Córdoba, Cáceres, Badajoz, Huesca…». Este fue el argumento que, durante elmitin que se celebró en Ponferrada el último domingo con la asistencia del presidente del Gobierno, volteó desde el atril del pabellón Flores del Sil el ‘patrón’ y diputado nacional. Un guiño a media asta o, más bien, un apaño verbal ante el creciente e indiscutible leonesismo. Ahora bien, todo ello sin el menor atisbo de traspasar la línea roja de su partido, en cuanto a la continuidad de Castilla (y León) como autonomía. En definitiva, la martingala emboscada y falaz, que, envuelta con celofán, se viene vendiendo desde hace unas semanas para confundir a la gente. Y a sus sentimientos. Pura palabrería.

Mientras, los dos ‘amos’ del leonesismo oficial, Luis Mariano Santos, el secretario general del partido, y Eduardo López Sendino, el vicesecretario, andan inmersos en revalidar sus actuales competencias en el organigrama del partido y, de retruque, sus posibles cargos institucionales. ¿A mayor gloria de la UPL y de sus fieles y sufridos afiliados? El tiempo lo dirá. Pero a la UPL le sigue faltando un tranco, un golpe sobre la mesa para continuar ‘demoliendo’ –o al menos intentarlo– la situación autonómica imperante. Muchas mociones a favor de la escisión de Castilla en los ayuntamientos de la provincia –en el de León fue histórica al ser respaldada por el grupo socialista, con el alcalde José Antonio Diez a la cabeza–, pero en la Diputación, que es el órgano que coordina a los municipios de menos de 20.000 habitantes –es decir, en la provincia a todos, a excepción del de la capital leonesa, Ponferrada y San Andrés del Rabanedo– no se mueve una paja. Calma total. La UPL, con su representante y vicepresidente 1º en el mando jerárquico de la institución, mantiene una pusilanimidad inquietante. Incluso, inexplicable. ¿Cuál es el motivo para estabular una postura con tamaña rigidez? Las lecturas podrían ser varias. Y, desde luego, acaso inconfesables.

Pues bien. En el supuesto de que La Unión del Pueblo Leonés registrara en la Diputación una iniciativa a favor de la autonomía leonesa –algo improbable a la vista de los antecedentes y el nulo espíritu de llevar adelante esa acción– tendrían que retratarse todos los grupos políticos durante el Pleno presidido por el socialistaEduardo Morán. Y se acabó la tontería. AlPSOE, al PP y aCs se les caería el barniz y el óxido de su adulterado y neófito leonesismo. En pedazos. De sopetón. ¿Por qué, entonces, no mueve ficha la UPL? Alto secreto.
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