Una ruta versátil

La ruta de Portilla de la Reina hacia los valles que bajan del Calar de las Corcadas de Ceranzo tiene varias posibles variantes

Vicente García
05/11/2021
 Actualizado a 05/11/2021
Calar de las Corcadas de Ceranzo desde la ruta. | VICENTE GARCÍA
Calar de las Corcadas de Ceranzo desde la ruta. | VICENTE GARCÍA
Generalmente las rutas que parten de Portilla de la Reina se dirigen a las altas cumbres situadas hacia el Este, pocas rutas van hacia el Oeste, aunque hay algunas como la ascensión a la cima del Calar de las Corcadas de Ceranzo, que sobrepasa los dos mil metros y es una mole caliza entre bosques y matorral.

Esta ruta tiene dos partes, desde su inicio hasta el collado Codes va por un camino amplio y cómodo sin posibilidad de pérdida y los vadeos del arroyo pueden hacerse fácilmente sobre los puentes que se han colocado cuando baja bastante agua. Sin embargo desde el collado Codes el camino se convierte en senda que una vez se baja al arroyo de la Reguera es preciso adivinar continuamente con vadeos no demasiado claros y ascensiones a media ladera por caminos encharcados y una vez que se sale al río Salceda el camino es más evidente entre suaves praderas, pero los vadeos continuos del arroyo pueden hacerse imposibles sin mojarse en tiempos de exceso de caudal, incluso pueden ser peligrosos por lo que no se aconseja esa parte de la ruta en tiempo de cauces colmados.

Para modificarlo hay dos posibilidades, la primera sería llegar a la collada de Codes y volver por el mismo camino y la segunda se realizaría tras pasar el sexto puente, antes de la majada que hay en el arroyo de Majadavieja tomar un camino que sale a la derecha y sube hasta el collado de las Barreras de 1491 metros descendiendo por la parte alta del valle de la Boria siempre bajando hasta la carretera de Santa Marina de Valdeón para volver así a Portilla.Solamente las personas bien preparadas en la época de exceso de caudal de los arroyos deberían hacer la segunda parte de la ruta que se propone aquí y siempre teniendo en cuenta que se debe buscar el tenue sendero existente. También, al ser circular se puede hacer a la inversa como ha hecho hace semanas el club de montaña Yordas y se deben tomar en consideración las advertencias aquí presentadas.  La rutaComienza la ruta y sus variantes en la localidad de Portilla de la Reina, subiendo en dirección norte para salir hacia el Oeste siguiendo el arroyo de Vallorza y no la carretera a Santa Marina de Valdeón. Tras andar un tramo paralelos al arroyo, viendo en algún momento zonas de pudinga por las que baja el agua formando extrañas figuras, se sigue cuesta arriba para llegar a un puente que cruza el arroyo, un puente de madera realizado de forma artesanal pero muy eficaz para poder pasar sobre una tabla con una barandilla. El camino sigue con vadeos continuos por puentes similares al primero, aunque al entrar dentro de la hoz hay uno de cemento y la cuesta que sigue está también cubierta de cemento para evitar el barro y las caídas, pues la pendiente es muy fuerte.Al final de la cuesta se encuentra una portilla desportillada, el camino deja de tener la pendiente que ha traído hasta este momento, continúa al lado de escobas recientemente desbrozadas, cruzando poco después el arroyo por otro puente de tablas, el sexto y último. Tras este puente siguen unos metros en línea recta para dar un giro a la izquierda y tras ese giro sale un camino hacia la derecha que asciende hacia el collado de las Barreras, donde se sigue a la ruta más sencilla explicada anteriormente. Sin embargo el camino continúa hasta llegar al amplio valle de Majadavieja, donde se ve al fondo la mole calcárea del Calar de las Corcadas de Ceranzo, una cumbre que se ha ascendido en una ruta anterior en estas mismas páginas, desde Casasuertes. En este valle hay una caseta de pastores, que puede ser un buen lugar para hacer un descanso.

Continúa la ruta cruzando el reguero Majadavieja, y a partir de este punto, el arroyo que se va a seguir a continuación toma el nombre de Valdeoscuro, dejando atrás  el Vallorza que se ha seguido hasta este lugar. Continúa un camino  sin grandes desniveles hasta llegar al estrechamiento del valle, donde se abandona el cauce del arroyo Valdeoscuro para girar hacia la izquierda a través de un hermoso hayedo que asciende con bastante desnivel hasta llegar al collado de Codes, donde hay una vista excelente de las cumbres circundantes.

A continuación se toma un sendero que va en dirección Noroeste viendo el Calar de las Corcadas de frente, pasando por un hayedo que en este otoño está espectacular con un colorido extraordinario, para después llegar a la altura del arroyo de la Reguera y una vez allí girar a la izquierda bajando arroyo abajo por un sendero que a veces casi no es perceptible, se debe poner en este tramo mucha atención porque el camino va por la derecha o por la izquierda del arroyo, vadeando continuamente el mismo, en esta parte suele traer poco agua, aunque se debe tener cuidado.

Más adelante el valle se abre a una vega algo más amplia con una majada en ruinas, la Majada del Monte de las Encinas, para introducirse de nuevo en el arroyo que se estrecha, debiendo buscar senderos cerca del mismo, a veces caminando a media ladera, otras vadeando el arroyo o yendo al lado del mismo por una senda que se debe adivinar. Al final la senda deja el cauce arroyo y sigue por la parte izquierda, subiendo para descender más tarde, pasando sobre una roca enorme, que posteriormente se baja por un camino más amplio, para vadear de nuevo el arroyo, siguiendo por la ribera opuesta para salir a un sendero que lleva a un puente destartalado entre maleza y, cruzando ese puente, se sale al camino que va a la derecha a Casasuertes y a la izquierda a Portilla siguiendo el curso del río Salceda. Se ha de tomar esta última dirección y poco después se encuentra un refugio bastante adecentado y cuidado. A partir de este momento el camino es bastante cómodo y evidente, sin altibajos ni otro problema que no sea vadear el arroyo de Salceda, que es mucho más caudaloso y en tiempos de mucho agua obliga a descalzarse, aunque puede haber épocas que hasta resulte peligroso cruzarlo y es necesario cruzarlo bastantes veces, por lo que es recomendable ver cómo están los caudales de agua para enfrentarse a esta parte de la ruta. Hacerla a la inversa puede dar la pauta de si es viable o no, pero son muchas veces las que se debe vadear el arroyo sin más que un puente al final.

Se llega por último a la carretera de Santander paralela al río Yuso, con cuidado se hace el recorrido hasta el cruce con la carretera de Valdeón para seguirla y entrar en la localidad de Portilla donde finaliza la ruta.
Lo más leído