Cada cual. Pero la realidad es que Interviú sí mantiene una larga «conexión leonesa», imposible de resumir en un par de páginas pero sí recordar algunos de sus momentos más significativos en relación con esta tierra.
María Salerno, de Colle a portada
Pese a que es famosa la broma de que los hombres se disculpan al comprar Interviú con que son muy interesantes sus reportajes no es menos cierto que una de las señas de identidad de la revista, para bien o para mal, ha sido sus portadas. Estos días se ha vuelto a hablar de muchas de ellas: Marisol, Lola Flores... hasta unos decadentes últimos años con retales de programas basura de la tele (ya no pagaban).Sólo una leonesa ocupó la portada de Interviú, en su época gloriosa, fue actriz María Salerno, también estrella de la radio con el serial más famoso de la misma, la radionovela ‘Simplemente María’. Fue en octubre de 1981, cuando la revista costaba 100 pesetas y la leonesa se había incorporado al llamado cine del destape con películas como ‘A la legión le gustan las mujeres’, ‘El erótico enmascarado’ o ‘El masajista vocacional’. De todo ello hablaba María Salerno (o Marta Monterrey) quien confesaba que «ya no me acuerdo de Simplemente María» pues centraba más su carrera en el cine. Mejor recuerdo guardaba de su paso por‘Un, dos, tres… responda otra vez’, del gran Chicho Ibáñez Serrador. El programa de Kiko Ledgard, Don Cicuta y las famosas azafatas… con ella, en la primera edición, estuvieronAgatha Lys oBlanca Estrada, que también saltaron al cine del destape. Tenía entonces la leonesa 35 años y con el tiempo abandonó el cine y montó dos peluquerías en Madrid.La vinculación más directa de León con Interviú llega, sin embargo, a través de quien fue uno de sus directores, Jesús Maraña, leonés de Sahagún, que después de incorporarse a esta revista fue nombrado su director en el año 1999, permaneciendo hasta 2002, cuando le encargaron la dirección de todas las publicaciones del Grupo Zeta.
Los "doce sueldos de Isabel Carrasco" o "los líos de la presidenta" fueron asuntos que la revista llevó a sus páginas en numerosas ocasionesEn su etapa, explica el propio Maraña, la apuesta más fuerte fue por «mantener y potenciar el elevado nivel de los colaboradores», entre los que se encontraba otro leonés, también de aquella comarca, el novelista Jesús Torbado, habitual en las páginas de la revista. DE esta herencia presumía la primera directora que tuvo Interviú, Teresa Viejo, quien a la hora de ‘definir’ la revista señalaba: «La información es diferente a la que suele usted encontrar en la prensa diaria: son historias propias, cercanas y con un referente social importante. Es fácil de leer y muy agradable de ver: las fotografías son imaginativas y comprometidas. Tenemos los mejores articulistas (Manolo Vázquez Montalban, Jesús Torbado, Guillem Martínez, Luis Sepúlveda, Fernando Savater, etc)». Y un leonés, Gonzalo López Alba es uno de los colaboradores de la revista en su adiós. Todavía el pasado lunes publicaba el artículo ‘Silencios cómplices’, que comenzaba así: «Que el asesino deDiana Quer sea del clan de Os Fanchos nos deja marcados de por vida». Aunque esta reveladora sentencia la pronunció una vecina del autor confeso de la muerte de la joven, es seguro que la han pensado muchas veces Os Fanchos porque, según expertos en psicología, estos grupos familiares se comportan como enjambres de abejas, aunque en este caso cuadraría mejor decir enjambre de avispas...».
Pero también leoneses se puede decir que fueron algunos de los reportajes «de investigación» que aparecieron en numerosos ejemplares de la revista y accedieron a compartir portada con la famosa mujer del desnudo. Los dos más recordados fueron el seguimiento del presunto intento de asesinato al consejero gallego Cuiña por encargo del empresario Martínez Núñez y los famosos «doce sueldos» de Isabel Carrasco, al que siguieron otros reportajes.
Corría muchas veces por León la leyenda urbana, si estaba agotado en los kioscos, de que «los implicados» ordenaban comprar todos los ejemplares.
Otro caso leonés, éste no de investigación sino conocido por todos, el llamado Caso Nevenka propició el salto de la colaboración literaria al aspecto periodístico de uno de esos colaboradores de los que hablaba Teresa Viejo, Juan José Millás, que llegó a escribir una novela basada en este caso. La revista, por su parte, dedicó varios reportajes a los negocios de Ismael Álvarez en Ponferrada...
La minería —la Marcha Negra, los últimos de Ciñera...—, los sucesos —La descuartizadora o El crimen de Herreros—, o los personajes —como Leonardo, el fabricante de crecepelos— fueron otros de los muchos leoneses que desfilaron por las páginas de Interviú.