Una obra de 315.000 euros zanja el grave problema histórico de vertidos del polígono La Barca

El Ayuntamiento de Ponferrada inicia la ejecución de una obra de saneamiento y depuración en el polígono de La Barca, en la carretera de Molinaseca, y el barrio del Pedracal para solucionar un problema histórico y grave en cuanto a afección ambienta, porque todos los vertidos de este área  vertidos iban bien  a una fosa séptica o bien directamente al cauce fluvial.

Así lo explicó el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, en la presentación de la obra, quien reconoció que "la situación era complicada y conocida en gobierno anteriores" si bien no se había tomado hasta ahora ninguna decisión. Olegario Ramón afirma que desconoce si en todo este tiempo, la Confederación Hidrográfica Miño- Sil ha realizado apercibimientos o planteado sanciones al Ayuntamiento por vertidos incontrolados directamente a cauces fliviales de las aguas residuales de este polígono, pero lo que sí tiene claro es que para su equipo de gobierno esta obra era "prioritaria", aunque sea "de esas que no tienen mucha visibilidad". Sospecha que precisamente por esa razón, por ser una obra costosa y poco vistosa, ningún otro gobierno municipal anterior decidiera afrontarla.

La empresa Acoval se encargará de la realización, que tendrá un coste de 315.000 euros y un periodo de ejecución de cuatro meses. Las tierras ya están siendo removidas para realizar las zanjas en las que se instalarán modernos colectores de 1,5 kilómetros a lo largo del llamado camino de Matinot, hasta llegar a conectar con la red de saneamiento de la Mancomunidad del Bierzo Bajo. 

La obra presenta algunas complejidades técnicas, ante la necesidad de realizar zanjas de hasta cinco metros de profundidad, de realizar 30 pozos de registro y por la coincidencia de redes de gas, eléctrica y de saneamiento.  Los trabajos incluyen también la renovación y ampliación de la red de abastecimiento, soterrar parte de la línea eléctrica, eliminar una torreta y eliminar la fosa séptica que recogía las aguas residuales del barrio.

Finalmente, se realizará un asfaltado del camino, unos 7.000 metros cuadrados que se incluye ya en el plan de asfaltado municipal. "Se va a mejorar mucho todo el acceso a esta zona, al barrio, huertas y fincas de recreo", explicó. Son actuaciones, insistió "no visibles una vez finalizadas, pero absolutamente necesarias".