Una fiesta identitaria que cierre la 'integración' de Castilla y León

El secretario general de Comisiones Obreras en Castilla y León, Vicente Andrés, ha propuesto la celebración de una fiesta de carácter identitario en la provincia de León que se sume a la celebración institucional del Estatuto de Autonomía el 25 de febrero y la de Villalar el 23 de abril con el fin de contribuir a la integración de la comunidad.

Andrés, en declaraciones a Europa Press, ha enmarcado esta propuesta en una reforma «en profundidad» del Estatuto de Autonomía, el cual cree que «no se puede abrir cada tres meses», que debería de «cerrar» todo lo que se refiere a la integración de la comunidad, la corrección de desequilibrios y las señas de identidad.El líder autonómico de Comisiones también se ha referido así al debate en torno a la Fundación Villalar, a la que a su juicio hay que «dar una vuelta» porque ha recordado que la comunidad está «compuesta por dos regiones históricas y por lo tanto hay que plantear esta comunidad desde el Estatuto de Autonomía hacia adelante» porque considera que no es necesario revisar el mapa autonómico.«Lo que sí hace falta aquí es hacer nuestra comunidad, integrar la mejor, corregir los desequilibrios en el término económico y también en términos identitarios», ha explicado Vicente Andrés, quien ha hecho hincapié en que Castilla y León nace como tal en 1983, «no antes», y cree que aún no se ha cerrado esa «fase».

Así, cree además que a lo mejor hay que cambiar algunas leyes derivadas también del Estatuto de Autonomía y la que fija la fiesta de Villalar, «no para que desaparezca», sino para integrar a la parte leonesa de la comunidad, que ha recordado que es de las más grandes de España y de la Unión Europea, con gran territorio pero también patrimonio histórico, que también es la cuna del parlamentarismo que fue León.

«Tenemos una comunidad en ese sentido muy rica, pero es que además la conforman dos regiones, es un elemento diferenciador, es que eso no es un problema, es que es una ventaja. Es un problema si no se hace bien y es una ventaja si se hace bien», ha asegurado.

A este respecto, cree que por ejemplo es muy difícil acudir a organizar una jornada de debate histórico con la Fundación Villalar, primero por el nombre, pero después porque cree que hay que resaltar las señas de identidad con las que cuenta Castilla y León, que actualmente por ejemplo pasan por el Diálogo Social, que se recoge en el Estatuto, pero también el talento o la creatividad, además de la historia pasada, que también «es de gran valor».

Por ello, ha señalado que es importante la historia de los comuneros como una de las primeras revoluciones pero también las cortes leonesas, por lo que ha pedido hacer de todo eso «un gran valor», algo complementario y «no un problema de enfrentamientos».

En definitiva, cree que hay que «rematar» lo que se empezó y cree que se está «a tiempo» en lo que considera que es un «deber histórico» y que cree que se debería haber hecho en el primer periodo de Juan Vicente Herrera, cuando se constituyó la Fundación Villalar, cuando habría que haber dado el paso hacia la «integración» de las dos regiones en una «gran comunidad» como la que se tiene.

Precisamente esta cuestión es una de las críticas que haría a Herrera, que a su juicio en 2003 no se entendiera bien lo que hacía falta en la comunidad, que era «la integración» y cree que es el momento de discutir eso «para definitivamente cerrarlo.