Una entrada con mucho arte

La pasada semana era noticia el Museo de la Siderurgia y la Minería de Sabero (MSM) por recibir, por primera vez, la visita de Javier Ortega, consejero de Cultura de la Junta, de la que depende este museo nacido con el fin de la minería en este valle.

La visita coincidía con una serie de novedades importantes, como era dar a conocer que las viejas escuelas van a albergar el Archivo Histórico de la Minería en la comunidad o visitar las excavaciones arqueológicas que permitirán ‘recuperar’ la parte de la historia del MSM dedicada de la siderurgia y volver a conocer el dibujo de los altos hornos, que están en el origen de aquella vieja ferrería de San Blas que hoy alberga el museo.
Cuenllas: "Es arte público para todos, visitable en cualquier horario. Se trata de acercar el arte al espectador e intervenir espacios que no suelen ser utilizados para exponer"
Tantas historias juntas tal vez dejaron algo «arrinconados» a un grupo de artistas leoneses que estaban allí para inaugurar una gran exposición titulada ‘Del reciclaje al arte público’, en la que todos los presentes tenían alguna obra. Ya se sabe ‘la manía’ de los medios de comunicación de escuchar a los políticos y no se prestó excesiva atención al representante de los artistas que explicó «la alegría de exponer en este nuevo espacio para ellos, al aire libre, e iniciando una itinerancia que llevará sus obras a otros espacios».

Y, sin embargo, su exposición era seguramente lo más llamativo, lo que concitará las miradas de quienes se acerquen a la ferrería y el museo mientras las obras —de gran tamaño (todas de 2x1,5 metros)— permanezcan repartidas en las inmediaciones del MSM, desde el exterior de la entrada o los soportales a la explanada o los edificios cercanos.

Es curioso el origen de esta exposición ‘Del reciclaje al arte público’ pues el soporte de estas obras era originariamente «unos paneles informativos de una exposición de arquitectura titulada ‘Con o sin techo’, que mostró, durante su itinerancia, el hábitat urbano precario en América latina y los mecanismos para mejorarlo».

Con posterioridad había sido donada al área de Educación Plástica, Visual y Audiovisual del colegio Marista San José, por los arquitectos José Carlos Álvarez Moratiel y Pedro Lorenzo Gálligo, con el objetivo de reciclarla. Además, arquitectos y artistas darán charlas didácticas presenciales o por video conferencia en la Escuela de Arte y Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de León y en varios centros educativos como Pastorinas, Legio, Agustinos, Leonés, Champagnat, entre otros,como parte de este proyecto expositivo.
Los paneles eran de una exposición anterior de arquitectura y fueron ahora reciclados
La itinerancia de la muestra comenzó en los exteriores del museo de Sabero para luego desplegarse por otros espacios abiertos al público, interviniendo artísticamente lugares en los que nunca se había mostrado arte con anterioridad.

Esta exposición forma parte de un proyecto más amplio, que aúna objetivos artísticos, sociales y didácticos, y que cuenta con actos y exposiciones paralelas, como la realizada en la galería Cinabrio (San Andrés del Rabanedo, León), en la que participan más de 30 artistas.
Comisariada por Carlos Cuenllas los artistas que participan en la misma son: Marian de la Puente, Jose Antonio Alonso-Santocildes, Rafa Anel, Efraim Ortega, Lùa, Noemí Rovina, Alba Alfageme, Gemma Garcìa Blanco, Lou Guerrero, Pedro Tapia, Alexandra Alonso-Santocildes, Rodrigo Martín-Granizo, Davinia F. Duport, Eva Martín, Fran de Gonari, Carlos Luxor, Marc GreenBase, Carmen Coque, Luis Prado Allende ‘Sito’, Ana Cristina Martínez, Vicente Soto, Elena Moral y el colectivo Alfaem Salud Mental León con el Arte.

Las técnicas utilizadas por estos artistas leoneses son muy variadas, con el denominador común de los elementops reciclados. Hay óleo, spray o esmaltes, tal y comoi explicaba el comisario de la muestra, Carlos Cuenllas, que no pudo acudir a la inauguración por motivos laborales:“Es arte público abierto a todos, visitable en cualquier horario. Se trata de acercar más el arte al espectador, a la vez que intervenir artísticamente espacios exteriores que no suelen ser utilizados para exponer arte».