Una de chuletas

Por suerte reinan, mayormente, usos civilizados. Si no, Alberto Garzón estaría ya, cual laica versión de Lorenzo de Roma, más que mal emparrillado, pues más de uno lo habría dejado churruscar.

Pero vayamos al mensaje y no al mensajero ya chamuscado por tanto sabihondo que tenemos en colesterol, grasa saturada, etc.

¿Decía el mensaje publicado algo de suprimir el consumo de carne o recomendaba reducir éste ya que, en España y en 2020, el consumo percápita fue de 49,86 kilos, es decir, el doble de lo que recomienda la Agencia Española Seguridad Alimentaria y Nutrición y, a mayor inri, fue de 57,49 kilos en Castilla y León?

Nada que decir a las reacciones de los grandes productores, tengo siempre muy presente que «esto es el mercado, amigo»; mas sí llamó mi atención el efecto llamada que tal mensaje causó y motiva. Fue mentar la carne y llenarse el circo de chuletas dando chuletas, también por uso civilizado, sólo verbales. Cuatro ejemplos:

Cito primero, por cortesía, a Cristina Cifuentes quien, en una muestra más de su ejemplaridad y comprensión auditiva, tuiteó: «…después del desaforado ataque del ‘ninistro’ ‘@agarzon’ al sector ganadero y agrícola, y en solidaridad con ellos, voy a zampar carne como si no hubiera mañana…». Así, tipo máster en carretas.

El primer chuleta en zumbar –en contestación en rueda de prensa– fue el gran simplificador, Pedro Sánchez, que, amnésico de que dicha reducción del consumo cárnico ya figuraba en su famoso informe, plan o, visto lo visto, ‘show’ España 2050, se marcó la irónica burla de: «A mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible»; (ya lo sabéis peperos: a negociar, chuletón mediante, todo lo pendiente, que lo reventáis imbatiblemente).

No muy tardo anduvo el medio líder de las derechas Pablo Casado para, entre meritorio y sobrado, emulando al Aznar ¡viva el vino!, hacer su propio ‘sketch’ neoliberal alimentario, que no alimenticio. Le quedó bien, me hizo reír.

Por último, al rebufo genovés, el nunca bien loado presidente autonómico, Fernández Mañueco, cantó (no lea segundas intenciones) que a partir de septiembre esto va a ser un ¿no quieres carne?, pues toma chuletón y medio.

¿Una de chuletas? ¡Marchando!

Ñor… da… pacien... Pe… ¡ya!

Lo sé, si usted ha llegado hasta aquí pensará que el título tiene trampa. Pero confiésese: ¿lo habría leído si lo llego a titular ‘De la comprensión lectora y auditiva’? Lo dudo. Y, sin embargo, ya habrá visto cuánto de una y otra carecen algunos necios.

¡Salud!, y buena semana hagamos y tengamos.