Un paseo por la Ribeira Sacra

Una ruta en la que se puede conjugar un paseo a pie entre molinos, varios miradores, finalizando, si se desea, con paseo en catamarán por el río Sil

Vicente García
10/08/2018
 Actualizado a 19/09/2019
Una de las vistas de la ruta hacia el Sil. |VICENTE GARCÍA
Una de las vistas de la ruta hacia el Sil. |VICENTE GARCÍA
La Ribeira Sacra es una zona que se sitúa en las vegas del río Sil, muy conocida por sus viñedos y la calidad de sus vinos, que en muchos casos encierran una serie de problemas, incluso peligros para cultivarlas, sobre todo las que se encuentran en las laderas del río Sil donde la pendiente es muy pronunciada y que solo pueden ser trabajadas y recogidas por medio de lanchas o barcas.

Se trata de una corta ruta que coincideen parte con la senda de pequeño recorrido PR-G 86 de los viñedos de la Ribeira Sacra y puede programarse para que al llegar al embarcadero de Chancís se de una vuelta en el catamarán para ver el cañón del Sil en directo, para ello es necesario reservar plaza porque si no se corre el peligro de no poder realizar el paseo naval.

Es una ruta muy agradable para el verano, ya que es corta y se camina cerca del arroyo donde existe un fuerte desnivel que al final es bastante mayor y la carretera debe descenderlo en una pronunciada revuelta, mientras que el arroyo cae en una impresionante cascada que llega hasta el embarcadero.La rutaComienza la ruta en la localidad de A Boca, desde donde se sigue por un camino cercano al arroyo Camilo entre praderas y bosques hasta encontrar casi a medio kilómetro en el lugar llamado Pouso do Blanco el primero de los molinos muy bien restaurado con el nombre de Roque do Arroxó, el nombre se daba al molino correspondía a su propietario inicial y, aunque a lo largo del tiempo se compraran o vendieran, el nombre se seguía conservando. Luego se camina por el canal de conducción de agua para llegar a otros dos molinos llamados Nemesio da Boca, uno de ellos más grande para que el molinero descansara en un pequeño habitáculo. A continuación, tras cruzar el río Camilo se llega a los de Chucan y Couto. Más tarde, se encuentran los restos de otros dos molinos y tras seguir bajando por el río y ver un mirador hecho de madera se llega al molino de Nemesio da Boca, que tienen un sistema diferente para mover el mecanismo: si en los demás el agua discurrís horizontalmente, en éste su caída vertical, como el sistema de las norias, hace mover el sistema de molienda. Posteriormente, se encuentran otros dos molinos de los que solamente se conserva su estructura y la ruta sale a la carretera para seguir hasta el aparcamiento de Os Chancís, donde existe una cafetería de donde sale un sendero que va hacia el mirador al Sil, que se encuentra cerca y que se sigue ascendiendo hasta llegar a una pequeña cima con varios pinos entre las rocas, desde donde la vista de la revuelta del Sil es asombrosa. Desde este punto se desciende hasta una zona en la que se ven los trabajos realizados para adecuar el terreno a las viñas, aterrazando las zonas de demasiado desnivel y preparando el acceso. Es preciso en este punto salir un poco hacia el río y allí se verán las barandillas de la ruta, solamente hay que seguirlas y bajar al camino que va nuevamente a la carretera, para bajar ya al embarcadero de Chancís, donde se puede, si se ha reservado previamente, hacer el recorrido en barco. Para volver se debe seguir el mismo camino en dirección contraria, pasando por alguno de los molinoshasta la localidad de Boca, o bien volver por la carretera que se encuentra sobre los molinos. También es posible finalizar en este lugar la ruta si se tiene la logística adecuada, por lo que solamente se realizaría el descenso.
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