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Un otoño divertido

22/08/2018
 Actualizado a 10/09/2019
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Ya estamos de vacaciones. Ya se respira tranquilidad por las calles de León. Después de las lluvias que enfangaron el inicio del verano en forma de Operación Enredadera, y pese a que la plaza del Grano sigue siendo una china en el zapato del equipo de gobierno del Ayuntamiento de la capital, Silván y compañía ya están fuera de los focos, por más que la Operación Enredadera promete agitar la actualidad leonesa durante mucho tiempo, quizá durante años hasta que haya una sentencia, si llega.

Pero la tranquilidad ha llegado para quedarse porque así nos lo quieren hacer creer. Todo hacía indicar que después del verano empezarían los movimientos internos y externos para posicionarse en las próximas elecciones, que no están tan lejos. Y esto afecta no solo al Consistorio de la capital, sino también al resto de la provincia y al conjunto de Castilla y León. Será más difícil ver a los alcaldes y concejales de los núcleos más importantes haciendo campaña, porque todos han tenido algo que ver en la Operación Enredadera, desde León hasta Astorga, pasando por Ponferrada, San Andrés del Rabanedo o Villaquilambre.

O quizá sí, quizá hagan campaña como si no hubiera pasado nada puesto que, según dicen todos, no han hecho nada ilegal, algo que también llega a la Junta de Castilla y León. De hecho, no serían los primeros imputados, si llegan a serlo, que hacen vida normal como tal cosa, porque pasa ahora con alguno de los implicados pero también con otros de las tantas tramas que afectan a León.

Otra cosa es lo que piensen los votantes el próximo año, cuando haya que elegir entre unos representantes políticos totalmente limpios y otros que, al menos, mantenían conversaciones con el cabecilla de la trama, que sigue en la cárcel, o eran nombrados en las decenas de llamadas que hay registradas.

Será, sin duda, un otoño divertido.
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