Un lugar encantador en pleno corazón de Babia

La Riera-Puerto de la Fonfría es una ruta que aparece reflejada, junto con otras 42, en el libro de Julio Álvarez Rubio ‘Babia y Luna’ editado por Calecha

Vicente García
24/03/2017
 Actualizado a 18/09/2019
La Peña Buron sobre la Riera y al fondo la sierra de la Cañada. | VICENTE GARCÍA
La Peña Buron sobre la Riera y al fondo la sierra de la Cañada. | VICENTE GARCÍA
La comarca de Babia es una amplia región situada en la parte central-occidental de la Cordillera Cantábrica de la provincia de León. Regada por el río Luna y limítrofe con Asturias, Luna, Omaña y Laciana es zona de verdes prados en verano, donde vienen los pastores trashumantes a pasar las épocas más cálidas de la península debido a su fresco clima y sus pastos duraderos.

La de Babia tiene hermosas montañas que han aparecido en bastantes ocasiones en estas páginas y la ruta que hoy se presenta puede servir como inicio para ascensiones a cumbres cercanas y muy sencillas de coronar a pesar de que parecen abruptas y demasiado verticales, pero buscando el lugar idóneo todo se consigue. La Fonfría o Fuenfría es un arroyo de montaña, no demasiado caudaloso en la mayor parte del año, aunque con el deshielo se complica un poco su vadeo al entrar en el Prado Chao.

La ruta es de ida y vuelta aunque el regreso podría hacerse siguiendo el camino de la derecha y bajando por el lado opuesto al de subida, por las tardes el sol se va antes en esa zona y es más fresca.

Es interesante reseñar que esta ruta aparece en el libro de Julio Alvarez Rubio ‘Babia y Luna’, junto con otras 42 más publicado este mismo año por la Editorial Calecha.

Desarrollo de la ruta

Comienza esta ruta en la hermosa localidad de la Riera, lugar de montaña con calles estrechas y empinadas. En la parte más alta se encuentra la iglesia y al lado una fuente con lavadero, donde se puede uno abastecer de agua.

Desde la iglesia parte un camino valle arriba, en dirección oeste-noroeste, debajo de la Peña Burón, que hay que seguir hasta que se encuentra un cierre a base de somieres e inmediatamente el arroyo de los Corralines que se cruza por un puente. Posteriormente hay un cruce de caminos, pero ambos se juntan más arriba (aunque no hay que seguir por el valle de los Corralines).

El camino continúa ascendiendo sobre el arroyo de la Fonfría y tras algunas revueltas se llega a una majada a la derecha del camino en la zona de los Zampicones. Luego continúa subiendo y tras algo más de 2 kilómetros se llega a una amplia pradería llamada Prado Chano, donde hay unas puertas de forja que hay que pasar y cerrar después, para vadear más tarde el arroyo de la Fonfría y ascender hacia el camino de la derecha. Se sigue por ese camino, viendo a la izquierda las fuertes pendientes del Pico de la Crespa y a la derecha las amplias praderas. Al internarse en la vega de Fonfría van apareciendo al fondo los distintos picos, el más característico es el Picón, que desde este punto parece inaccesible, así como la Peña Valgueira, la Malvosa y Peña Redonda.

Se llega a una caseta que aún se mantiene en pie, con una majada casi caída, para continuar subiendo hasta encontrar lo que también fue una caseta, pero que la fuerza de los aludes y los temporales han hecho que cayera al suelo y se desplazara bastantes metros. Era la majada de Fonfría. Más abajo, a la orilla del arroyo se encuentran unas construcciones también ruinosas que debían formar parte de las canteras, nombre que se da a esta zona donde hay calizas rojas que se pueden extraer en prismas bastante regulares.

La majada caída es el final de esta ruta desde donde se puede continuar hacia los Eros y el Montihuero, la mayor cota de este circo.

Una vez se haya contemplado el hermoso paisaje y descansado se regresa por el mismo camino.
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