Un lavado de cara para el casco histórico

Diez empresas pugnan por ejecutar el contrato de mantenimiento durante tres años y por reurbanizar Pablo Flórez, San Pelayo y Serradores, las tres calles aún pendientes

Alfonso Martínez
30/11/2017
 Actualizado a 19/09/2019
Losetas hundidas y rotas en la calle Platerías. | L.N.C.
Losetas hundidas y rotas en la calle Platerías. | L.N.C.
El Ayuntamiento de León adjudicará a lo largo del mes de diciembre el proyecto de rehabilitación y adecuación de la urbanización del casco histórico de la ciudad. Así lo confirma a este periódico el concejal de Infraestructuras y Deportes, José María López Benito, quien indicó que el objetivo es que el desarrollo de las obras arranque en el primer trimestre del año.

Un total de diez empresas se han presentado al concurso de un proyecto licitado en 900.000 euros y que contempla un plazo de ejecución de tres años. López Benito explica que el contrato incluye actuaciones de mantenimiento en todo el casco histórico de la capital, aunque destaca también la reurbanización completa de las calles Pablo Flórez, San Pelayo y Serradores.

Son las tres únicas vías que no se habían renovado en el marco del plan de peatonalización del casco histórico que la capital impulso a mediados de la década de los 90.
Las obras proyectadas comprenden una serie de actuaciones completas orientadas a mejorar no sólo el aspecto estético sino también funcional de las calles y sus infraestructuras.

El Ayuntamiento prevé que los trabajos arranquen en el primer tramo de 2018 con un desembolso de 900.000 €Los principales trabajos previstos en estas tres calles consisten en primer lugar en la renovación de las redes de saneamiento y abastecimiento existentes, mejorando las secciones de los colectores existentes, y renovando los colectores, sustituyendo los existentes de hormigón o fábrica de ladrillo por nuevos materiales plásticos.

Además, el proyecto contempla la ejecución de nuevas canalizaciones enterradas para red eléctrica y de telecomunicaciones, y ejecución de canalizaciones para alumbrado también enterradas, con objetivo de eliminar en un futuro todas las instalaciones colocadas en las fachadas.

López Benito se refiere también a la renovación de la pavimentación de las calles para adaptarlas a un tráfico de coexistencia con los peatones. Para ello se definirá un vial a un único nivel, delimitando las bandas de usos peatonal y de tráfico rodado mediante encintado con bordillo de granito y cambio de material del pavimento. El material previsto para la banda peatonal es adoquín de piedra tipo Calatorao, mientras que el de la zona de tráfico rodado es adoquín de hormigón.

Este proyecto incluye los trabajos para acometer la renovación del firme en las calles Platerías y CardilesEl proyecto diseñado por el Ayuntamiento de León prevé además actuaciones destacadas en otras dos calles que se reurbanizaron en su momento pero cuyo estado actual es manifiestamente mejorable. Es el caso concreto de Platerías y Cardiles. Las actuaciones propuestas prevén darle continuidad a la pavimentación existente en la calle Varillas hacia la calle Cardiles. Consiste en un adoquinado del vial reservado al tráfico rodado con adoquín de piedra de Calatorao, que en la calle Varillas ha mostrado hasta la fecha un mejor comportamiento frente al tráfico de vehículos. Se pretende dar solución además a los problemas actuales que se registran en estas calles, puesto que hay infinidad de losetas rotas o hundidas, lo que genera notables encharcamientos en las épocas de lluvias.

De forma paralela a todas estas actuaciones principales, López Benito explica finalmente que el pliego del concurso pendiente todavía de adjudicación prevé que a lo largo de sus tres años de periodo de ejecución se podrán llevar a cabo mejoras en cualquier otro punto del casco histórico en el que se detecten deficiencias.
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