Un consenso ejemplar

Algunos podían copiar. Algunos podían seguir el ejemplo de Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero, que ayer pusieron de manifiesto que las discrepancias política –en ocasiones muy acentuadas cuando lideraban el PP y el PSOE respectivamente– no tienen por qué estar reñidas con el talante y con el consenso en algunas cuestiones que son fundamentales para el futuro de nuestro país. Los dos expresidentes participaron ayer en un coloquio organizado con motivo del 40 aniversario de la Universidad de León. Se da la circunstancia de que ambos han estado vinculados de una u otra forma a la ciudad. Rajoy vivió unos años y cursó sus estudios de Bachillerato, mientras que Zapatero pasó en ella toda su infancia y juventud, estudió en la ULE la licenciatura de Derecho, conoció a su esposa e incluso llegó a impartir en la ULE clases como profesor asociado. El coloquio aportó argumentos de gran interés en torno a la situación de la democracia en nuestro país, ya que ambos han tenido ocasión de conocer en profundidad los resortes del Estado de Derecho y se han visto obligados a afrontar situaciones muy graves, como atentados, crisis económicas o, más recientemente, el desafío independentista. Rajoy y Zapatero dejaron patente que, tras cuatro décadas de vigencia de la Constitución Española, nuestra democracia está consolidada. No obstante, el espíritu de consenso que ayer mostraron los dos expresidentes debería trasladarse por lo menos a cuestiones fundamentales en que los actuales líderes de sus partidos discrepan abiertamente.