Son muchas las personas que no se resignan y que quieren seguir en sus pueblos. Y no son pocas las que optan por volver a ellos con el objetivo para labrarse un futuro profesional ante las dificultades de la crisis o sólo para huir de las prisas de las grandes ciudades.
Seguramente sea el caso de algunos de los 204 emprendedores rurales que el pasado año se beneficiaron del plan de ayudas de la Diputación, que supone básicamente el pago del 80% de la cotización como trabajadores autónomos durante un periodo de dos años. Cabe recordar en este sentido que hasta la convocatoria de 2017 la duración de la ayuda era únicamente de un año.
Los datos aportados a este periódico por la institución provincial reflejan que la cuantía de las ayudas concedidas durante el pasado año se situó en un total de 535.634,57 euros. Esto deja una media de 2.625,66 euros para cada uno de los 204 beneficiarios.
Es preciso destacar además que el número de solicitudes presentadas a la hora de emprender en los pueblos leoneses se situó en 214, por lo que sólo diez habrían sido denegadas por no ajustarse a las bases de la convocatoria.
Los sectores de actividad
Por sectores, los servicios acaparan un 68% de las iniciativas económicas impulsadas en el marco del plan de la Diputación. Fueron concretamente 139 y destacan los servicios profesionales (70), el comercio (42), la construcción (28), la hostelería (25), las profesiones liberales (18) y la artesanía (5).Mientras, la agricultura y la ganadería centraron 63 proyectos emprendedores que recibieron ayudas de la institución provincial (un 31%). Los dos restantes (1%) correspondieron al sector agroalimentario.
La estadística facilitada desde la institución provincial refleja también que 114 beneficiarios del Plan de Emprendedores eran hombres (56%), mientras que 90 eran mujeres (44%). En cuanto a la edad, los datos establecen que 47 emprendedores rurales (23%) eran menores de 30 años, mientras que los 157 restantes superaban esa edad (77%).
Las ayudas del Plan de Emprendedores de la Diputación llegaron el pasado año a un total de 116 localidades de la provincia. La más pequeña fue Tedejo, que tiene únicamente 18 habitantes y registró un nuevo proyecto económico, mientras que la más grande fue Astorga, que tiene un total de 10.758 vecinos y albergó 15 nuevas actividades empresariales al amparo de las ayudas que concede la institución provincial.
La capital maragata es precisamente una de las localidades con mayor número de proyectos. Y comparte el título de localidad más emprendedora con Villablino, que también registró 15 nuevos proyectos económicos. Les siguen Bembibre (13), Valencia de Don Juan (11) y La Bañeza (5) y con cuatro emprendedores beneficiados estarían Cacabelos y La Robla.