Para ilustrar su posición, los responsables del sector en FSMC-UGT León, Juan Antonio Martínez Salvadores y Pedro Aller, argumentan que el jefe de la patronal asturiana, Ovidio de la Roza, ha criticado recientemente la externalización de empresas de Asturias hacia León, por los menores costes laborales. Señalan también que mientras algunas empresas tienen problemas para formar sus plantillas en otras hay lista de espera para entrar a trabajar.
Con ello consideran que la forma de reducir el déficit de conductores no es tratando de atraer a los trabajadores con menos oportunidades en el mercado laboral, sino propiciando las condiciones laborables pertinentes para que haya profesionales que quieran trabajar en el sector en León. En este sentido, apuntan que los conductores profesionales leoneses prefieren desplazarse hasta Zamora, donde el convenio provincial está unos 4.000 euros al año por encima del de León, apuntan desde UGT.
El sindicato señala que el sector cuenta con algo más de 2.300 conductores asalariados en León, 300 de viajeros y 2.000 de mercancías. A ellos se sumarían unos 10.000 autónomos, situación que distorsiona el mercado laboral. En cuanto a las condiciones criticas por UGT, apunta la inexistencia de jubilación anticipada en una profesión con un alto desarraigo social y familiar, que obliga habitualmente a pernoctaciones fuera del domicilio, con jornadas cercanas a las 15 horas. Apuntan que personas mayores de 60 años tampoco están siempre en las mejores condiciones para circular por las vías públicas con vehículos de gran tonelaje. En el caso particular de León, señalan que el salario fijado en convenio (unos 1.100 euros) está escasamente por encima del Salario Mínimo Interprofesional (SMI, 900 euros), que las subidas registradas están por debajo del IPC o que el complemento por incapacidad, en un trabajo con riesgos, es el peor de la comunidad.
Por otra parte, consideran que las empresas han tratado de compensar el aumento de los costes de la actividad (combustible, autopistas, etcétera) con recortes en "salario y condiciones" en lugar de repercutirlos en el billete, algo que ha provocado que la situación laboral de los trabajadores, a su juicio, haya "tocado fondo".
Los representantes d los trabajadores rechazan también los argumentos de la patronal que atribuye el déficit de conductores a la necesaria formación para ejercer de conducción. Fesmc-UGT recuerda que es necesaria una formación de 280 horas en la modalidad ordinaria y 140 en la modalidad acelerada que tiene un coste de unos 2.500 euros. Contraponen esta formación y su coste con la del sector ferroviario, en la que el curso de 1.050 horas y el coste del curso está entre los 21.000 y los 24.000 y, sin embargo, hay lista de espera. Por ello, reiteran que son las condiciones laborales las que más influyen en la falta de personal y consideran que la formación no debe revisarse.Critican también la falta de medidas extra de conciliación o de igualdad en los convenios leoneses, cuando una de las pretensiones de la patronal es la atracción de empleo femenino, que tiene tasas bajas en el sector, según explican.
Control horario
En este contexto, Fesmc-UGT también ha lanzado una campaña informativa sobre el obligatorio control horario. El sindicato ha editado un cuadernillo que facilita el cómputo a los trabajadores, en un sector en el que, según denuncia, sigue habiendo fraudes. Reclaman también un mayor control por parte de la Inspección de Trabajo, ya que apuntan que no se pueden considerar solo los tiempos de conducción en las 1.800 horas anuales de la jornada laboral del sector.