UGT denuncia la falta de agentes medioambientales en León

El sector de Administración Autonómica de UGT Servicios Públicos de León denunció este martes en un comunicado la situación de los agentes medioambientales de la provincia y mostró “gran preocupación la deriva a la que está llevando el Servicio Territorial de Medio Ambiente al servicio público que presta”. Afirman que el colectivo sufre una gran deficiencia de efectivos, en torno al 30 por ciento en la provincia, dado que la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) marca 189 plazas y en apenas llegan a 130. En el caso de la comarca berciana, la RPT establece 42 plazas para ese colectivo en el territorio que abarca, de las que están cubiertas 32, lo que supone una merma del 25 por ciento.

Este problema de falta de efectivos, señalan, se acentúa debido a que la administración utiliza al personal de campo para funciones administrativas de oficina, imponiendo funciones que no son de su competencia, además de vulnerar las bolsas específicas de cuerpos generales o la posibilidad de solicitar estos puestos en comisión de servicios al personal fijo de la Administración.

Este Servicio Territorial, a juicio de UGT, es “referente en la opacidad a la hora de gestionar tanto la información como sus recursos” y recuerdan que no se comunican los incendios fuera de la época de riesgo y es el que más incumple la Instrucción de Comisiones de Servicio, ya que o no las publicitan o se saltan los plazos y demás requisitos.

Todo ello, subrayan, hace que muestren “una gran inquietud” de cara a la campaña de incendios forestales, a la de control de pesca -de gran relevancia en la provincia- y de de control de la caza, “pues la falta de personal está suponiendo y lo seguirá haciendo un detrimento de este servicio”. Además, lamentan que se plantee una reducción de guardias de incendios de este colectivo en algunas comarcas de la provincia, disponiendo de menos efectivos de disponibilidad automática en estos momentos de peligro.

UGT también quiere hacer constar que este colectivo, junto a otros cuerpos de funcionarios con una titulación superior, deberían pertenecer al grupo B, lo que conllevaría unas retribuciones acordes con su titulación y las funciones que desempeñan. Sin embargo, añaden, y al igual que el resto de empleados públicos de la Junta, se les paga muy por debajo que en el resto de comunidades autónomas, “algo insólito, pues el acceso a una plaza de la Junta exige unos conocimientos muy por encima de la titulación para poder optar a una plaza por oposición, conocimientos que los políticos no se les exige para legislar”.

Por último, recuerdan que los agentes de Medio Ambiente son considerados agentes de la autoridad, “pero la realidad es que sufren un agravio comparativo con el resto de cuerpos, puesto que no pueden acceder a la jubilación anticipada”.