UCCL denuncia que la renta de los profesionales del campo es un 37% inferior a la media

La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), tras revisar los datos de la Agencia Tributaria sobre los rendimientos agrarios netos declarados en 2017, que es el último ejercicio disponible, ha constatado que los rendimientos netos medios de los declarantes que viven fundamentalmente de la actividad agraria se encuentra un 36,5 por ciento por debajo de la media de la base imponible declarada. A nivel regional, Castilla y León es la cuarta comunidad con el nivel de renta medio más bajo, situándose en 9.287 euros.

Según estas mismas fuentes, a medida que disminuye el tamaño de la población, decrecen también de forma progresiva tanto los rendimientos del trabajo, como los rendimientos de las actividades económicas. Por comunidades, la Región de Murcia (15.703 euros), la Comunidad de Madrid (15.509 euros) y Andalucía (14.313 euros) son las comunidades que presentan un mayor nivel de renta entre los trabajadores cuya actividad principal es la labor agraria. Por su parte, Castilla y León (31 por ciento), Cantabria (29,5 por ciento) y La Rioja (25,6 por ciento) son las regiones que cuentan con un mayor peso de declarantes que viven fundamentalmente de la agricultura.

Según la información tributaria recogida por UCCL, en España, en el ejercicio fiscal 2017, habría un total de 1.042.414 declarantes de ingresos agrarios. Para el 81,2 por ciento de ellos, sus rendimientos agrarios representarían menos del 50 por ciento del total de todas sus actividades y, en el conjunto, solo generarían el 35 por ciento del rendimiento neto total agrario declarado en España.

Por su parte, los 195.714 que sí tendrían en la actividad agraria su actividad principal, habrían declarado ese año unos rendimientos netos medios de 11.707 euros, cifra que es un 36,5 por ciento inferior a la del conjunto de rendimientos, imputaciones de renta y otros componentes de la base imponible total del conjunto de las actividades declaradas a través del IRPF. Con ligeras variaciones, las cifras siguen la misma tónica entre los ejercicios 2014 y 2017, por lo que se puede considerar un escenario general.

Esta brecha económica que separa a los agricultores y ganaderos de otros ciudadanos afecta también al medio rural respecto del urbano. Así, en el mismo ejercicio 2017, mientras que los rendimientos medios del trabajo declarados en las poblaciones de más de 500.000 habitantes fueron de 26.360 euros, en los municipios de menos de 1.000 habitantes, la media estuvo en 13.437 euros. La tendencia es además progresivamente decreciente a medida que el tamaño de la población disminuye y también constante en el tiempo, ya que datos similares pueden encontrarse en los ejercicios precedentes.

Unión de Campesinos a través de su Unión Estatal, la Unión de Uniones, ha planteado una revisión de los indicadores de renta agraria del futuro Plan Estratégico de PAC que incluya, también, los rendimientos netos declarados por los agricultores a la Agencia Tributaria. De lo contrario, se estaría partiendo de un diagnóstico erróneo en cuanto a alcanzar el objetivo de mejorar las rentas de los agricultores, informaron fuentes de la organización a través de un comunicado.

Por otro lado, de confirmarse finalmente que en el nuevo Gobierno tendría cabida un Ministerio sobre el reto demográfico, su función principal será, dicen, abordar los motivos que conducen al desfase económico entre el medio rural y el urbano y que, con la infradotación en infraestructuras y servicios básicos, son la razón fundamental del despoblamiento y el abandono de la España vaciada.