Concretamente, la tasa de afiliación de los egresados en el curso 2013/2014 asciende al 76,2 por ciento. De esta manera, la ULE se sitúa en el puesto 23 de las 82 universidades analizadas, la primera de las públicas de Castilla y León y cuatro puntos por encima de la 'colocación' media nacional de quienes han terminado la carrera recientemente. Unos datos que se corresponden con la situación de estos titulados universitarios en marzo de 2018, según el registro de la vida laboral de la Seguridad Social.
Los hombres tienen más facilidad para encontrar un empleo, alcanzando un 79 por ciento en la tasa de afiliación a los cinco años de graduarse. Por su parte, las mujeres de la ULE 'se colocan' en el 72,4 por ciento de los casos.
En lo que respecta a contratos indefinidos, el porcentaje baja hasta una media del 61,1 por ciento, pero continúa sensiblemente por encima de la media nacional. En este apartado de empleos más estables se desploman especialmente las mujeres. Menos de la mitad de tituladas universitarias, el 48,2 por ciento, son contratadas de forma indefinida en menos de cinco años. La brecha con respecto a los hombres se sitúa en 22 puntos, ya que ellos logran un puesto de trabajo indefinido en el 70,2 por ciento de los casos.
Pocos autónomos
Únicamente el 7,7 por ciento de los graduados en la ULE están dados de alta como autónomos a los cinco años de terminar la carrera. En este apartado, el de los trabajadores por cuenta propia, el Campus de Vegazana se sitúa por debajo de la media nacional pero por encima de la autonómica.
Tanto por cuenta propia como ajena, los egresados de la ULE se ocupan a tiempo completo en un 85,2 por ciento de los casos. Un porcentaje hasta seis puntos por encima de la tasa media autonómica y nacional.
Menos trabajo con Máster
Otro dato curioso que arroja el informe de la Fundación CYD es que la tasa de afiliación es más baja entre aquellos que han obtenido un título de Máster en la ULE. Un 73,7 de estos egresados de másteres oficiales obtiene empleo en los cinco años posteriores a concluirlo.
Entre los titulados de Máster, las mujeres sí que consiguen un mayor nivel de ocupación que los hombres. Ellas logran un puesto de trabajo en un lustro en el 75,4 por ciento de los casos, mientras que ellos se quedan en el 71,6 por ciento. De hecho, las tituladas en un Máster de la ULE son las que mejor se 'colocan' de toda la comunidad y están entre los 15 primeros puestos en el conjunto estatal.
El porcentaje de contratos indefinidos para egresados de Máster cae de manera drástica con respecto a los de Grado. Solo un 37,1 por ciento de quienes han superado alguno de los másteres oficiales de la ULE consigue un empleo de este tipo en los cinco años siguientes a concluir sus estudios. La tasa de autónomos también se mantiene baja en el caso del Máster y solamente un 4,8 por ciento de estos titulados trabajan por cuenta propia.