Torneros a vueltas

El polígono de Torneros es el cuento que nunca acaba. Parece ser que por fin la Junta ha decidido finalizar el cuento, que sea feliz o no ya se verá. La Cumbre social de León que aglutina a más de una veintena de organizaciones de todo tipo (sindicales, políticas, asociaciones vecinales y muchas más, vienen luchando por el desarrollo del polígono de Torneros desde hace al menos tres años.

Primero porque en dicho polígono las administraciones ya han invertido más de 8,5 millones de euros desde 2009, seguramente se hizo pensando en contribuir al desarrollo económico y social de León, no para dejar abandonado este proyecto para la eternidad, como si nos sobrara donde tirar el dinero. En segundo lugar, porque el polígono de torneros puede suponer un balón de oxígeno para la provincia de León, por sus características y ubicación puede ser un polo de atracción para el asentamiento de muchas empresas que traigan empleo a nuestra provincia.

Estos días hemos tenido constancia a través de datos estadísticos, que a día de hoy si celebrásemos elecciones generales, León elegiría un diputado menos, pues la pérdida de población es constante. Siendo razonables con el panorama social y económico que tiene nuestra provincia, que joven con dos dedos de frente, se puede plantear quedarse en una ciudad que no tiene futuro, y casi nula oportunidad de encontrar un empleo.

Ha hecho falta mucho tiempo para que la Junta entienda que tantos colectivos sociales no podían estar equivocados reivindicando el desarrollo del polígono de Torneros. Por ello hay que congratularse que al final entiendan que Torneros puede ser un aliciente para cambiar el destino de una provincia que camina a la deriva. Sería fantástico que además se completara esta actuación con la inversión en la autovía León-Braganza, para que el desarrollo económico de nuestra provincia tuviera unas sólidas perspectivas de mejoría. Vía libre al fin para que el Estado busque financiación en la Unión Europea.