Tomar decisiones

Nadie dice que tomar decisiones en medio de una situación nunca vista en esta era como es la actual pandemia sea sencillo. Ni mucho menos. Es casi imposible no equivocarte, no dejar descontento a alguien, no exponerte a críticas futuras o presentes. Si estás al frente de algo, lo que sea, en estos momentos, reconozco que no te envidio. Pero sí te aplaudo si tomas decisiones y decides cumplir tu labor en lugar de esconderte debajo de la silla para buscar que no te salpique.

Esto se puede aplicar a muchos sectores. Por ejemplo, el de los Ayuntamientos de la provincia. Ver el caso de León, con un variado programa de actividades en verano, adecuado a las circunstancias pero permitiendo dar vida dentro de lo que se puede a la ciudad, es un ejemplo que ha seguido algún otro en la provincia. Quizá en una de ellas haya un problema y se le eche en cara, pero están ahí para decidir e intentar dinamizar el día a día, aunque lógicamente en un futuro la evolución sanitaria pueda obligar a dar un volantazo sobre lo previsto.

Otras Instituciones o Ayuntamientos, por el contrario, han optado por la solución sencilla.No organizo nada, no abro nada, no hago nada. Así seguro que no hay problema, de paso me cargo este festival de turno que relacionan con los que estaban antes que yo en el Gobierno o consigo ahorrarme quebraderos de cabeza, porque trabajar y gestionar, ¡uf, qué pereza!

Esto pasa a nivel local, pero también en un ámbito de tanta repercusión como el fútbol. Ahí, en la Federación Española, a unRubiales que tenía complicado hacer bueno a Villar pero lo ha logrado en muy poco tiempo, si algo hay que reconocerle es que cumple de forma escrupulosa con una de las indicaciones principales de la lucha contra el virus: lavarse las manos con frecuencia.

La buena salud de la Segunda B es lo de menos, que hay que meter 100 equipos, ¡adelante! ¡que sean 102! ¡O 110! ¿Y del inicio de la nueva liga? ‘Qué marrón, que decida otro, que si lo hago yo igual salgo escaldado de algo que para mí es un estorbo que me distrae de la selección y la Supercopa’. Eso sí, que nada le quite de meterle en un charco contra Tebas, así que para sumarse al surrealismo colectivo de los 24 equipos en Segunda sí anda vivo .