"Supone un reto profesional y una vivencia impresionante"

En noviembre de 2020, «tras darles mi nombre un colega de Uruguay del Máster de Metodología de Entrenamiento», la Federación de Kuwait se puso en contacto con el extécnico del Ademar, afincado desde hace muchos años en León, Isidoro Martínez, para ofrecerle el cargo de seleccionador nacional del país asiático.

Sin embargo, tras estar «prácticamente dos meses hablando del proyecto», no se llegó a un acuerdo, siendo el principal «punto de discordancia que exigían 10 meses de permanencia en Kuwait», por lo que finalmente se decantaron por un grupo de técnicos eslovenos.

Sin embargo, dos años después y tras no tener con ellos los resultados esperados, la opción se volvió a abrir, «hace un mes retomamos los contactos», las condiciones se flexibilizaron permitiendo acudir al país asiático sólo para las concentraciones y campeonatos, e Isidoro Martínez se ha convertido en el nuevo seleccionador de Kuwait durante un año, hasta abril de 2023, aunque con vocación de continuidad, pues de hecho «me ofrecían hasta 2024 y dijimos que mejor firmar hasta 2023 y ahí valoramos, si os gusta el trabajo seguimos adelante y si no frenamos».

Así lo reconoce un Isidoro Martínez que volverá a los banquillos tres años después de dejar España júnior, y cuando por segunda vez pensó que no volvería a hacerlo: «Tuve dos veces la sensación de no volver a entrenar nunca más, la primera el año que dejé el Ademar y la segunda tras dejar la selección, pero te vuelven a llegar las opciones».

«Tuve llamadas de Segunda de Francia y Alemania, pero no me planteo entrenar a un club, no quiero irme de León» Es la que le ha convencido, aunque no la primera: «He tenido llamadas de de equipos de Segunda de Francia y Alemania, pero no me he planteado marcharme a vivir fuera de León, priorizo el tema laboral y familiar, y con la júnior o ahora con Kuwait podré conciliarlo, aunque sacrifique tiempo de calidad en el periodo vacacional. Pero no me planteé entrenar a un club, mi prioridad siempre ha sido la Universidad excepto el año de primer técnico del Ademar, me gusta la tranquilidad».

¿Y el ‘gusanillo’ volvió en algún momento concreto a picarle? Pues Isidoro señala que «en verdad veo todas las semanas 6 u 8 partidos de balonmano y doy clase de él, así que no estaba alejado del deporte sino de la competición».

A ella regresa ahora con Kuwait, selección a la cual traerá de hecho en el mes de junio a entrenar a León, y en donde en el primer contacto «he visto cositas interesantes, no me ha disgustado nada el nivel de las promesas y arriba hay dos o tres jugadores que podrían estar perfectamente en Asobal, pero luego tienen el problema de adaptarse al país, hay que intentar convencerlos de dar el salto para crecer».

«Veo todas las semanas 6 u 8 partidos de balonmano y doy clase de él, sólo estaba alejado de la competición» «Es un reto personal y profesional, y una vivencia impresionante, me lo tomo más así que como una oportunidad», añadía Isidoro Martínez, que además de entrenar a la absoluta hará lo propio con la júnior, mientras que su segundo, el también exademarista Diego Dorado, dirigirá al juvenil.

¿Sobre lo que le han pedido? El seleccionador apunta que «saben que el modelo de España con el que llevamos muchos años en categorías inferiores luego tiene su reflejo en la absoluta y quieren empezar desde abajo, nosotros ya les hemos dichos que los entrenadores españoles tenemos tradición, estamos bien valorados y queremos hacerles crecer, pero que no somos magos».

«Buscamos pelear por las medallas en júnior. Ojalá en 2 o 3 años en absoluto se luche por ir a Mundiales o Juegos» Por eso, a la hora de hablar de retos y objetivos, Isidoro apunta que «en los Juegos Asiáticos júnior y juvenil del verano queremos estar cerca de las medallas, es difícil pero hay que buscar quedar entre los cuatro primeros», mientras que en la absoluta, que ha sido séptima u octava en los últimos cuatro Campeonatos de Asia, considera que «habrá que esperar a la competición para fijar metas, con Catar y Bahrein por encima habría que mirar a ese tercer puesto que da acceso a grandes campeonatos. Vamos a intentar hacer un buen papel y luego ya veremos si ojalá en dos o tres años se puede pelear por entrar en Mundiales o Juegos».

Puntos de mira ambiciosos para un proyecto ilusionante y al que poco a poco Isidoro intentará dar forma.