Subvenciones y prevendas

Es de todos conocido, que los fondos públicos en muchas ocasiones se reparten sin ningún tipo de criterio, más bien podemos afirmar que muchas veces es un privilegio al alcance de muy pocos. Para poner un ejemplo basta con mencionar el reparto de subvenciones a empresas.

Una larga lista de empresas pasan por problemas financieros, en muchas ocasiones son problemas financieros ficticios, producto del interés y la ingeniería contable, yotras veces son problemas reales. Lo que no deja de ser cierto es que muchas empresas gozan del privilegio de recibir subvenciones y ayudas públicas por parte de la Junta de Castilla Y León.

Somos muchos los que nos preguntamos cuales son los criterios para acceder a este tipo de privilegios. La empresa Benteler, ubicada en Venta de Baños en Palencia con 75 trabajadores, ha recibido en los últimos diez años 2,9 millones de euros. Seiscientos mil de ellos recientemente.

Pues bien, yo me pregunto que privilegios o méritos tiene esta empresa, que no tiene laempresa editorial Everest ubicada en León con unos 300 trabajadores. Como otras tantas empresas de León en apuros, Everest no ha accedido a estas subvenciones o privilegios, tan solo está pidiendo un préstamo para tener liquidez y poder continuar con el negocio. A no ser que el problema sea precisamente ser empresas de la provincia de León.

Parece que para León, eso de ser apéndice de Castilla es un problema. La conclusión a laque muchos leoneses llegan, es que lo único que nos une a Castilla es la ‘y’. Los fondos y subvenciones destinados al mantenimiento de la catedral de Burgos están distantes y muy por encima de los destinados a León.

Puede que haya llegado el momento de plantearse hasta que punto las autonomías crean desigualdades dentro de nuestro país. A lo mejor va siendo hora de plantearse que la gestión y el reparto de los fondos públicos debieran ser a través de las estructuras provinciales como las diputaciones.