Subiendo el Torío desde el tren de vía estrecha

Ruta infantil con alicientes para hacer el camino más agradable, apetecible y variado

Vicente García
24/03/2023
 Actualizado a 21/06/2023
Al lado del río. | VICENTE GARCÍA
Al lado del río. | VICENTE GARCÍA
Las rutas con niños deben proporcionar alicientes a los más pequeños y el viaje en tren puede ser uno de ellos. Por ello se propone utilizar el tren de vía estrecha desde León a Manzaneda de Torío y la vuelta desde el apeadero de Pedrún, donde se encuentra la Xana de Torío, un excelente establecimiento con amplia oferta cultural y especialmente dedicada a los niños con actuaciones de cuentacuentos y animación para los más pequeños. También cabe la posibilidad de comida y alojamiento en ese lugar, que es parte del apeadero donde finaliza la ruta. Otra ventaja de este lugar es que está abierto todo el año.

La ruta pasa por varias zonas de juego donde los niños pueden relajarse un poco y disfrutar haciendo más llevadero el camino. También puede hacerse en sentido contrario, pero esperar en el apeadero de Manzaneda se puede hace un poco pesado y por ello es preferible esta opción.Es aconsejable que las rutas con niños se hagan con más compañeros porque así se hacen más amenas y llevaderas. Es cierto que el paisaje, la Naturaleza y los diversos hitos del recorrido pueden ser agradables para los más pequeños, pero la actividad en grupo hace más ameno el recorrido.A lo largo de toda la ruta el río se va a encontrar al Oeste, mientras que en el Este hay montes arbolados y vallejos con arroyos que acaban en fuentes que han sido señalizadas por parte del ayuntamiento y se recogen en la ruta. La ruta Comienza la ruta en el apeadero de Manzaneda de Torío, un poco alejado de la localidad del mismo nombre. El primer problema se presenta en el cruce de la carretera de León a Matallana, muy concurrida y con vehículos que no suelen respetar el límite de velocidad, por lo que es muy necesario controlar el paso, especialmente para los niños. Tras cruzarla se sigue por la carretera que va a la localidad de Manzaneda, no tan concurrida, pero como carretera, hay que estar atento al paso de vehículos. Al final se llega a la localidad y a la entrada es necesario girar a la izquierda en un pequeño parque para seguir hacia el santuario. Este tramo asfaltado tiene menos tráfico, pero no está exento de riesgos, por lo que hay que estar atentos a que los niños tengan cuidado con los vehículos. Llegados al santuario se puede contemplar su estructura y construcción, aunque, para los niños, el parque que se encuentra en sus alrededores, es el principal aliciente. En esta zona finaliza uno de los arroyos que bajan desde los montes, el arroyo de Valdecarreros.La ruta continúa y el camino abandona el asfalto, que se transforma en tierra, lo que puede conllevar barro y charcos en momentos de lluvia o humedad. Va entre robles que hacen sombría la ruta en verano y por praderas a la vera del río. Se pasa sobre el arroyo Valcayo que va al caserío de la Vega, en el vivero que hay al sur de Matueca.Al cabo de un tiempo frente a Matueca, el río hace una fuerte revuelta y el camino pasa a su lado, un lugar donde los niños lo pueden contemplar, teniendo cuidado si baja muy caudaloso y jugar cerca del agua. El camino sigue cómodo y amplio apartándose de la ribera, entre praderas, para aproximarse otra vez al río, sin llegar a la ribera porque el camino se separa y comienza a subir una cuesta no demasiado larga ni pronunciada para llegar al cruce con otro camino que baja de algo más arriba, juntándose ambos para pasar al lado de las fuentes de Llagos, al lado de la desembocadura del arroyo Valdellagos, pasando a continuación al lado de las fuentes del Piojo y la Serrica, señalizadas por el Ayuntamiento de Garrafe, llegando poco después al cementerio nuevo de Pedrún para entrar a continuación en las calles de cemento de la localidad.

Se cruza Pedrún para llegar a la iglesia, en cuya parte de abajo hay otro parque infantil donde los niños pueden jugar otro rato, para cruzar a continuación el puente sobre el río Torío y seguir por camino asfaltado, donde se encuentran otras fuentes, hasta llegar de nuevo a la carretera general siguiendo hacia la derecha hasta que se cruza con mucho cuidado para tomar el camino de enfrente que va hacia la vía donde hay un paso paralelo a la misma que lleva al apeadero de Pedrún donde se encuentran las instalaciones de la Xana de Torío donde finaliza la ruta.

Para volver se toma el mismo tren de regreso a León.


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