SOS frente a la obesidad infantil desde Ponferrada

Los anuncios de comida rápida con formatos atractivos para los niños, las máquinas expendedoras que cada dos pasos se multiplican por cuatro en las zonas urbanas sobre todo y la influencia de las nuevas tecnologías en la agenda diaria de los más pequeños de la familia conforman un trío peligroso que el nutricionista, Emilio José Álvarez pondrá sobre la mesa en su charla sobre «La obesidad infantil, una epidemia silenciosa», que impartirá esta tarde a las 19:00 horas en la Casa de la Cultura en Ponferrada.

Álvarez considera que el mayor problema de salud al que se enfrenta la sociedad hoy en día es precisamente ese, porque crea adultos enfermos sin consciencia de que han puesto las bases para serlo «lo ven como algo extraño, de Estados Unidos, lejano, pero en España tenemos la tasa de obesidad infantil más alta de todo el mundo». Unas cifras que han ido subiendo en los últimos años por los cambios sociales que acercan a los más pequeños a realizar poco ejercicio y a la comida rápida «usan las nuevas tecnologías cada vez antes y la comida basura es rápida y barata». Los anuncios televisivos «son muy agresivos y van mucho hacia los niños».

Álvarez pone como ejemplo Ponferrada, donde el paseo por las calles ya habla de esa multitud de sitios con ese tipo de comida, con anuncios alentadores, y la lucha solo puede hacerse, asegura el nutricionista «desde la educación».

Pero no solo inculcando los conceptos a los niños, sino también a sus padres mediante talleres en los que sepan aplicar dinámicas adecuadas para llevar una alimentación adecuada. Reconoce que también hoy «los niños tienen más autoridad sobre los padres» y eso hace que sea más fácil manipularles para que replieguen los alimentos más saludables por los que les piden los niños. Álvarez reconoce que, además de los problemas físicos, que tienen una predisposición genética pero no determinante, que llevan aparejados la obesidad infantil, también tienen una influencia negativa en la sociabilización.

Por eso su consejo es educar desde que el niño es consciente de lo que come «y con el ejemplo, porque aprendemos por imitación». Pero, advierte, nunca se debe poner a un niño a dieta «es muy peligroso poner a un niño a contar calorías», porque puede crear el efecto contrario al buscado y provocar una anorexia posterior. Comer comida saludable en una zona donde hay marcas de calidad de los productos «y eso ayuda, porque son naturales y están cerca», debe conformar «una manera de vivir» y que así sea visita por los niños cuando crecen «que les hayamos incorporado ya un estilo de vida que ven en nosotros y que quieren llevar», dice.

Álvarez ofrece una conferencia con el fin de trasladar la necesidad de poner coto a este problema, al tiempo que manifestó su esperanza en que sí es algo que se puede afrontar.