Soñando con subir a Tercera con el presidente de capitán

Cada fin de semana en Mansilla de las Mulas, un grupo de más de 20 amigos de la zona se juntaba para echar un partido de fútbol. Pero llegó un momento, hace ahora 14 años, que dijeron: ¿por qué no formar un club y enfrentarnos en una liga contra otros equipos?

Dicho y hecho. Disputaron la Liga de Amistad. Se inscribieron en Segunda Provincial. Ascendieron a Primera Provincial, donde el anterior club de Mansilla había estado dos veces pero descendiendo a la primera. No sólo se mantuvieron, sino que hace dos años lograron subir por primera vez en la historia a Regional Preferente. Y ahora, ese club de amigos que no se cansa de derribar puertas y superar expectativas, sueña con la Tercera División pues tiene a tiro en la recta final el ‘playoff’ de ascenso.

Segundo y tercero lo juegan y, a falta de tres jornadas, están a tiro de tres puntos del Mojados, a quien tienen ganado el golaveraje y que debe jugar todavía contra el líder, una Ponferradina B que apunta a ascender directa y en caso de victoria haría que el Mansillés dependiera de sí mismo para disputarlo.

«¿El secreto para que un club así esté tan arriba? Es como la remontada del Madrid, algo que no se puede explicar» Una temporada histórica de un club particular, donde el que ha sido el presidente desde el inicio, Luis Pacios, es también el capitán del equipo, pues fue uno de esos creadores y nunca ha dejado de jugar. Donde nadie cobra un euro, ni en cuestión de salario ni de dietas o primas. Que pelea con ciudades de 20.000 habitantes pero tiene casi los mismos socios y aficionados que sus rivales, pues Mansilla, que tiene unos 1.700, se vuelca y suele haber unos 300 en cada partido. Y que sorprende a propios y extraños con la profesionalidad que le parece aportar el trabajo oscuro y por amor al arte de muchas de las personas que le rodean.

«El otro día nos preguntó un rival que qué empresa nos llevaba la jardinería del campo, que estaba espectacular, y ya les dije que el delegado. Otro pone los carteles, dos personas nos hacen fotos... hay muchos más y eso sería imposible sin todos ellos», señala Luis Pacios, que compagina esas dos facetas de máximo dirigente y mediocentro que una vez que ya en la categoría actual es algo prácticamente inédito en España.

«Al inicio sorprendía. Igual venía la directiva a preguntar quién era el presidente y le decían: pues ese del campo» «Ahora la gente se va acostumbrando, al principio sí que sorprendía mucho en los rivales, que igual venía la directiva a preguntar quién era el presidente y le decían que ese que está ahí en el campo, o que quien había llamado para algo de organización, y veían que era un jugador», reconoce un Luis que vivió una de las mejores anécdotas en la pandemia, «un día que vino la Guardia Civil a un partido y querían hablar con el responsable, y le dijeron que estaba ahí dentro jugando, que luego ya se lo explicaron pero claro de primeras parece que te están tomando el pelo».

«Jugaré un 70% de los partidos, fui titularísimo toda la vida, pero los años van pasando», bromea el jugador de 34 años, que tiene claro que «nunca hahabido problemas, en primer lugar porque siempre he separado las dos funciones y en segundo porque aquí todo se toma en consenso. Se han cesado dos entrenadores en 14 años y ha sido con todos los votos de la directiva a favor, porque hay cinco y valen todos lo mismo para decidir, y hablándolo con la plantilla».

«Siempre separé funciones y se decidió en consenso. En 14 años cesamos 2 técnicos y fue hablando con la plantilla» «Se lo cuento a jugadores y entrenador al llegar. Intentamos garantizar la ficha a los del pueblo y la zona, luego ya el jugar es igual para todos», apunta un Luis que cuenta cómo «no seríamos suficientes sin tirar de gente de León, este año el técnico Héctor Pérez, que estuvo en la Peña, trajo gente que llamó y que quería venir a jugar con él, si no pues tiramos de las amistades».

¿El secreto para que un club así esté tan arriba? «Es como la remontada del Madrid del otro día, son cosas que no se pueden explicar. Es verdad que hemos intentado hacer las cosas bien y que la gente esté a gusto, pero cuando creamos esto jamás lo hicimos pensando en estos retos, ni siquiera en Regional, pero hay que decir que en Mansilla nos han apoyado todos muchísimo desde el inicio y eso ha ayudado».

Claves de una lucha inesperada que les deja a las puertas y en la pelea por un éxito que nadie podía imaginar.