Senderismo con mascarilla y distancias: "Parece que a la naturaleza le ha sentado bien este parón humano"

Retoman las rutas se senderismo guiadas por Las Médulas, con grupos reducidos, mascarilla obligatoria y un entorno en pleno esplendor tras dos meses sin gente

Diana Martínez
22/05/2020
 Actualizado a 22/05/2020
Imagen de archivo de senderistas por la ruta de los zufreiros, con árboles de más de 400 años de vida.
Imagen de archivo de senderistas por la ruta de los zufreiros, con árboles de más de 400 años de vida.
Las terrazas de hostelería y los comercios son quizá los sectores y actividades cotidianas que más protagonismo han tenido en esta Fase 1 de la desescalada en el Bierzo, así como en otros lugares. Pero hay otros permisos en esta etapa inicial tras el confinamiento que también tienen su público, su peso en la actividad económica y su importancia en cuanto al ocio y la salud. Se trata de las actividades de turismo activo y de naturaleza, una actividad que en las zonas de Fase 1 está permitida para grupos máximos de 10 personas y respetando las medidas de seguridad.

Con esas premisas se vuelven a poner en marcha las rutas de senderismo en Las Médulas, un entorno, del que, desde la Casa del Parque, se organizaban a menudo rutas guiadas, explicativas del paraje y la naturaleza.

Ahora, es la empresa de actividades La Jurbial Servicios Ambientales la que haceuna de las primeras propuestas de esta primera ruta tras el desconfinamiento. Será este sábado 23 de mayo por la senda de Los Zufreiros del Frade, y el guía será Luis Ortíz, bien conocedor de Las Médulas, donde desarrolla su trabajo desde hace años como monitor.

Solo 9 personas, más él, podrán participar en esta primera actividad. «Tenemos ganas e intención se seguir en junio haciendo rutas, pero esta primera va a ser un tanteo, a ver cómo responde la gente, que tienen que saber que es una actividad permitida y que manteniendo todas las medidas de seguridad, podemos hacerlo sin problema. La Naturaleza nos está esperando y podemos acudir a ella, eso sí, con mucho respeto, pero si la gente no ha tenido miedo a ir a las terrazas o a los supermercado, menos ha de tener a pasear por la naturaleza».

Luis lleva pateando desde hace años paca palmo de las rutas más conocidas y menos conocidas de Las Médulas y guiando a senderistas por ellas, descubriendo rincones para muchos de ellos y conoce bien cómo responde la naturaleza en cada época del año. Así, afirma que «los que trabajamos mano a mano en tareas de medio ambiente, creo que coincidimos en una cosa, a la naturaleza le ha sentado muy bien este parón, esta separación forzosa de los humanos».

Dos meses de confinamiento han supuesto que no haya habido presencia de personas en muchos entorno en los que diversos animales se han sentido más confiados. «Se aprecian muchos más pequeños mamíferos, también las aves han encontrado más y mejores lugares de cría, la vegetación, la ausencia de contaminación y de ruido…». Por eso, quienes consigan una plaza en esta ruta, van a ver el entorno de los Zufreiros de Frade del Lago de Carucedo en una auténtica situación de privilegio, la naturaleza en su máximo esplendor.

Será quizá una senda distinta, donde todos los participantes deberán llevar mascarilla y guardar las distancias. «Eso no es malo», mantiene Luis, «los pequeños grupos permiten una ruta más respetuosa con la naturaleza y en la que las explicaciones son más personalizadas». No obstante, aunque no haya muchas opciones de coger una plaza en esta ruta, habrá más, y esta senda de los Zufreiros es majestuosa en sí misma, aunque no se sea el primero en disfrutar. Los zufreiros son los alcornoques «y algunos tienen más de 400 años, constatados con método científicos, y mucha vida aún, la zona en la que se encuentran, como en una depresión cerca del lago hace que estén más protegidos y hayan durado tanto tiempo».

La rutatiene unos 8 kilómetros, sale a las diez de la mañana del parking de la Casa del Parque y tiene un coste de diez euros. Los senderistas deberán llevar ropa y calzado cómodo. Un contacto con la naturaleza esperado y deseado por muchos que puede convertirse en una de esas formas sanas y seguras, tranquilas y respetuosas de disfrutar de la primavera y el verano en el Bierzo.
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