Sebastián Román: "En los 80 existía una mayor conciencia ecológica"

El artista de Castrotierra de la Valduerna protagoniza la XXIV edición del proyecto artístico ‘El hall transformado’ con la pieza ‘Megapeligros’, con la que alerta del peligro de relajarse en la lucha contra el cambio climático

Joaquín Revuelta
26/05/2017
 Actualizado a 17/09/2019
Sebastián Román logra un curioso efecto visual con la instalación que ha presentado en Filosofía. | MAURICIO PEÑA
Sebastián Román logra un curioso efecto visual con la instalación que ha presentado en Filosofía. | MAURICIO PEÑA
Sebastián Román, uno de los artistas más inquietos y activos de la escena leonesa, vuelve a ser noticia por protagonizar la XXIV edición del proyecto artístico ‘El hall transformado’ que coordina el profesor Roberto Castrillo y que tiene como marco el hall de la Facultad de Filosofía y Letras, que desde el pasado 8 de mayo y hasta el 15 de junio alberga la instalación ‘Megapeligros’, con la que el artista de Castrotierra de la Valduerna quiere alertar una vez más sobre los peligros que se ciernen sobre el planeta como consecuencia del cambio climático.

Sebas comenta que la instalación se llevó un viernes completamente tapada y se montó a lo largo del fin de semana «con nocturnidad» con el objetivo de que el lunes los alumnos de la Facultad de Filosofía se llevaran la sorpresa de ver una instalación que solo se entiende si se recorre alrededor. «Es una pieza que trabajé con Taxi León. Ellos ya conocían mi trabajo y les comenté que quería trabajar con frigoríficos para crear una especie de holograma pero a lo bruto. La idea era que cada uno de los frigoríficos estuviera revestido con una parte de las cuatro imágenes que han ido marcado toda mi trayectoria. A raíz de eso se trataba de hacer un montaje que obligara al visitante a ir girando sobre la instalación, algo que pude comprobar ese lunes con satisfacción al ver como los estudiantes lo rodeaban y llegaban a comprender el funcionamiento de la pieza», recuerda Román, que el pasado miércoles protagonizó una charla en la que los alumnos le preguntaron por el efecto óptico que se crea cuando uno se gira alrededor de una instalación que está integrada por 32 frigoríficos y uno más en el que el artista explica el objetivo de esta pieza que tiene que ver con el relajamiento que en la actualidad se está dando con todo lo referente al cambio climático desde que en los años ochenta saltaran todas las alarmas por el agujero de ozono y cómo se iba abriendo el casquete polar. «Ahora mismo estamos en otro intento de la humanidad por desaparecer y pienso que esta vez se va a conseguir porque no se están tomando medidas para evitarlo, como sí se hizo a mediados de los ochenta. De ahí el título de ‘Megapeligros’ que le he puesto a la instalación», precisa.
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