
Estuvo la clave en una primera parte de ensueño, donde la escuadra berciana bordó el baloncesto y pasó por encima de un Sant Antoni para quien el 5-0 de salida fue un espejismo y a partir del 7-5 ya nunca más volvió a mandar en el marcador.
Mandó ya siempre de ahí al final el Ponferrada, cuya defensa secó al equipo ibicenco y que fue ampliando poco a poco su renta, que era de seis (17-23) al final del primer cuarto y, tras llegar a ponerse a dos (25-27) los locales en el segundo, se disparó en su tramo final con un parcial de 5-19 hasta los 16 (30-46) con los que se fue al descanso.
Esa llegó a ser su máxima ventaja, la cual aún mantenía con el 41-57 en el ecuador del tercer cuarto y tuvo por encima de la decena hasta el tramo final del partido, donde casi sin tiempo Sant Antoni hizo su última intentona en busca del milagro.
A ocho (72-80) se pusieron a falta de cuatro minutos y a seis (78-84) y con balón a falta de dos, pero Kaufmanis fallaba y la canasta de Bastante sentenciaba definitivamente la clasificación de un Ponferrada que sigue soñando.