San Juan cambia de sitio la Catedral del fuego y busca reconocimiento provincial

Más de 15 años haciendo que San Juan de la Mata homenajee al santo que le da nombre con una hoguera en la noche más corta del año y 11 de ellos con el sobrenombre adoptado de Catedral del fuego, que hace que cada año pasen a ver las llamas de más de 40 metros de altura más de 4.000visitantes, son los que cuenta Juan Salví como parte de su propia historia.

Durante este tiempo ha pasado de todo, pero sobre todo trabajo y este año se le ha multiplicado al tener que trasladar toda la infraestructura que ha ido construyendo a otra parcela porque en la que se hacía, cedida por los herederos de Paquito Alonso no han querido seguir haciéndolo.

Aunque Salví intentó negociar un contrato para hacerse con ella, al final no pudo ser y fueron los hermanos Salví-García, sus familiares los que le han permitido que pueda hacerla en sus terrenos. Eso varía la cita y pone a prueba Salví que estos días trabaja sin descanso para que todo esté a punto para la cita del día 23. Pone mimo sobre todo en colocar bien la madera para hacer que la llama crezca hacia arriba. Utiliza tanta materia prima que quiso presentarse al premio Guiness por el peso de la madera que hay bajo el fuego «movemos unos 300.000 kilos de madera, pero si nos hubiéramos presentado habíamos pensado superar los 500.000».

Pero finalmente aquella idea se vino abajo por la dificultad de certificar el récord, al tener que mover multitud de camiones para ello. Ahora lo que quiere es que la Catedral del fuego reciba el nombramiento de evento de Interés turístico provincial y asegura que cumple los parámetros para conseguirlo. Esa es una de sus metas, la otra es dejar en herencia la elaboración de la hoguera«mi sueño es que siempre se siga haciendo. No me gustaría morir sin saber que esto va a seguir», dice apasionado.

La hoguera que él enciende cada año nació «desde una locura» reconoce Salví y desde ese raciocinio se ha hecho grande. Empezó casi en el mismo punto en el que se encuentra, remangándose para realizar un proyecto que había conseguido contar con terrenos y que al final se vino abajo «pero entonces me dejaron La Alameda», recuerda, que es la misma finca que ahora recupera el evento «y quise hacer allí un monstruo de hoguera» de la que siempre se responsabiliza y en la que nunca se ha producido ningún suceso que lamentar. Al contrario, al lado del fuego ahora hay música chorizos y empanadas para compartir una noche especial. Salví asegura que la venta de esos placeres gastronómicos consiguen sufragar su actividad, aunque en los últimos años ha tenido que poner dinero de su bolsillo porque no se han consumido.

Este año con «algo de miedo» dice, volverá a ver las llamas de las que se siente arquitecto al lado de esos mil chorizos al vino repartir y de las 100 empanadas. Y para completar el evento, desde las 20:00 horas del día de San Juan los gaiteros de Bembibre amenizarán el encuentro en el pequeño pueblo de 55 habitantes. A ellos se sumará más tarde un concierto de música celta a cargo del grupo asturiano liderado por el gaitero Bras Rodrigo.

Acompañando a la música también estará presente el concejal de Medio Rural de Ponferrada por Coalición por el Bierzo, Iván Alonso, que será el pregonero de la celebración.