Recuerdos de los Mundiales

25/11/2022
 Actualizado a 25/11/2022
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No es que sufra, la verdad, lo hago mucho más con cualquier partido de la Cultural. Pero me encantan los Mundiales y ver a España en ellos por todo lo que les rodea y los recuerdos que te dejan grabados y años después aún te vienen a la mente.

Del primero que tengo recuerdo, el de Estados Unidos en 1994, lo único que me viene a la mente es estar viendo en Genicera con mi padre el Italia-España, cuando Tassotti le parte la nariz a Luis Enrique y nos mandan para casa. Visualizo perfectamente ese momento pero nada más del partido ni de nuestra reacción.

Del siguiente, de Francia en 1998, sería el partido de Uruguay, viéndolo junto a compañeros del León Club en el que jugaba, y con Chilavert parándoselo todo a España y quedando fuera ya en el grupo.

Del del 2002 en Corea es uno de los que guardo mejores recuerdos, por ir a ver partidos al bar que había al lado del Instituto Padre Isla y por el ‘madrugón’ para ver cómo nos robaban en cuartos juraría que justo el día después de un concierto de Manolo García en el Palacio.

El de 2006 en Alemania me hace irme a unos tiempos excepcionales como los del Colegio Mayor, viéndolos juntos todos los encuentros mucha gente, con gran ambiente ambiente y quizá por ello con la eliminación con la que más disgusto llevé, la del cruce con la Francia de Zidane.

Del título de 2010 lo primero que me viene a la mente son el ver tanto la semifinal como ya por superstición la final con mi amigo Pablo Campos en el mismo bar, y la gozada de celebración posterior con medio León en las calles.

De 2014, sin lugar a dudas, que el 1-5 frente a Holanda lo vi en Bélgica, en un bar lleno de holandeses en el que lo peor que pudo pasar fue que España marcara antes y quedara claro para todos que éramos españoles, porque a partir de ahí sólo les faltó dedicarlos en los morros cada uno de los cinco que nos cayeron.
Y de 2018... a ver, si soy sincero, más que la tanda de penaltis de Rusia lo que me viene es la primera de las ‘Rubialadas’ que luego se han convertido en habituales echando a Lopetegui tres días antes.

¿De 2022? Veremos. A ver, me sorprendería que nada tuviera que ver con Luis Enrique, pero quién sabe... ¿por qué no un título celebrado bajo la nieve?
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