Privilegios

Si prácticamente cada medida que se tome en esta situación genera polémica, todo lo que tenga que ver con el fútbol está condenado a tener múltiples comentarios a favor y en contra, como sucede de hecho en el día a día dentro de ‘la vieja normalidad’.

No podía ser menos con las medidas para su regreso, de obligado intento en categorías profesionales porque la suspensión dejaría al borde del abismo económicamente a muchos de los clubes.

¿Es imprescindible su vuelta? Evidentemente no, pero como la de muchas otras profesiones y en algún momento, dentro de intentar cumplir todos los protocolos marcados para garantizar la máxima seguridad, todas deberán volver porque la vida tiene que seguir.

Es evidente que no habrá riesgo cero entre los futbolistas, como no lo habrá entre aquellos que trabajan en peluquerías, clínicas de fisioterapia o bares que ahora se reincorporan a la actividad. Lo ideal sería teletrabajar hasta que se encuentre una solución que se va a alargar en el tiempo, obvio, pero hay profesiones en las que eso no es posible.

Y para bien o para mal, cuando mueves tantísimo dinero como el fútbol, es normal que fuerces para no suspender, independientemente de otros debates totalmente legítimos como si tiene sentido jugar sin público, y que busques la forma de hacerlo con la mayor seguridad posible, donde entran las famosos test masivos a realizar a las plantillas.

Algo que ha generado controversia fuera y dentro.. ¿En el debate exterior? No veo mayor problema a que una empresa los adquiera para sus trabajadores, como pudo hacer Seat o el BBVA, no es la situación de hace semanas donde si había para unos no tenían otros. ¿En el interior? Me parece de una hipocresía tremenda el ‘vender’ que los rechazas por el privilegio que es tenerlos cuando otros sectores de primera línea no los disfrutan.

¿Son privilegiados los futbolistas? Por supuesto, pero no es de ahora, no viene por los test. Supongo que también les parecerá un privilegio que, hablando de Segunda División, cualquier jugador por convenio cobre más de 7.000 euros al mes, más comparándolo con esas otras profesiones que citan ahora, pero seguro que ahí no llega ninguna renuncia...