Premio a 130 kilómetros de fuga

Sin diferencias ni movimientos entre los favoritos y con una larga escapada llegando a buen puerto. Así transcurrió la tercera etapa de la Vuelta a León, la primera de montaña, que unió Cármenes y Boca de Huérgano en un continuo sube y baja por la zona de Picos de Europa.

Y es que el actual campeón de la Copa de España élite, el corredor del Controlpack Gerard Armillas, tuvo el premio a más de 130 kilómetros de fuga al imponerse al sprint a sus compañeros de escapada, llevándose la etapa y colocándose además como nuevo líder de la carrera.

Segundo llegó el ciclista del equipo UCI Shatovkin, que como en Veguellina, cuando fue cazado en los últimos kilómetros, volvió a quedarse con la miel en los labios tras rodar prácticamente toda la etapa en solitario.

Samuel Blanco y Carlos García, que saltaron desde el pelotón, cazaron a apenas 3 kilómetros de meta a los fugados, pero el esfuerzo para conseguirlo les pasó factura y no pudieron pelear por la victoria final. Ibarguren, del Diputación, fue tercero en el sprint del pelotón, que llegó a 33 segundos.

El final más duro de la Vuelta, Los Ancares, marcará este jueves diferencias

Tras el primer contacto con la montaña, el pelotón afrontará este jueves el final de etapa más duro de la carrera. En los últimos 25 kilómetros habrá dos puertos, el último para cerrar la jornada de Primera Categoría: el durísimo Alto de Ancares.